ECONOMíA
› PROYECCIONES ECONOMICAS OPTIMISTAS DE ALFONSO PRAT GAY
“Hay que ponerse contentos”
Lejos de las declaraciones explosivas que lo tuvieron como protagonista en las últimas semanas, Alfonso Prat Gay prefirió enviar un mensaje optimista en su visita de ayer al Senado. Dijo que, a pesar de los mediocres augurios, la economía ya se aseguró un crecimiento del 4,5 por ciento para este año, pero no descartó que esa marca se extendiera al 5,9 por ciento. Habló de una inflación de un dígito, de mejoras en el salario real y de una emisión superior a los 7000 millones de pesos para aceitar la recuperación de la actividad económica.
Prat Gay estuvo dos horas y media frente a los senadores de las comisiones de Economía y de Presupuesto y Hacienda. Rindió cuenta sobre las correcciones hechas a la política monetaria previstas para este año, y para exponer se apoyó en la proyección de medio centenar de gráficos.
Uno de los que más destacó el funcionario mostraba que el Central se desvió en 7174 millones de pesos de la pauta de emisión monetaria, haciendo trepar la base monetaria a 42.830 millones. Para Prat Gay, esa particularidad fue un acierto: “No fue un mal desvío porque no se utilizó para solventar déficit público ni en salvar a los bancos. Hizo aumentar las reservas del Central”, explicó. Para el titular del BC, la emisión monetaria se dio en el marco de una mayor demanda de dinero por parte del público y de las empresas. “Hay que ponerse contentos”, le pidió a los senadores que lo escuchaban en el Salón Eva Perón de la Cámara alta.
Prat Gay también negó la interpretación de algunos economistas de que la actividad económica se está enfriando. Sobre este particular, sincronizó con los argumentos de Roberto Lavagna. Si bien admitió que el crecimiento entre abril y junio fue “más lento”, argumentó que “el ritmo del primer trimestre era insostenible”. Entre enero y marzo, la expansión anual llegó al 10 por ciento, mientras que en el trimestre siguiente declinó a entre 5 y 6 por ciento. El funcionario también destacó como positivo el hecho de que el empuje económico “se debe a una mayor demanda interna, a una incipiente recuperación en el consumo”.
Sobre la previsión inflacionaria, Prat Gay prefirió no arriesgar y ofreció un arco amplio. Señaló que este año se ubicaría entre 5 y 15 por ciento, “aunque creo que más cerca de un dígito”.
Como la meta de emisión monetaria no es exigible por parte del Fondo Monetario –es una pauta indicativa–, el Central va negociando con Washington continuas flexibilizaciones a las metas. Ayer, Prat Gay calculó que si la inflación se mueve dentro de lo previsto, la autoridad monetaria emitirá otros 6385 millones de pesos en lo que queda del año. Y en vez de hablar de un proceso deflacionario, el funcionario mencionó que la Argentina atraviesa un proceso “desinflacionario” provocado por la revaluación del peso.