“

Si nos sacan el hangar, nos sacan el corazón”, dijo ayer el director de Asuntos Corporativos de LAN Argentina, Agustín Agraz, en referencia a la decisión del Organismo Regulador del Sistema Nacional de Aeropuertos (Orsna), que solicita a la línea aérea devolver las instalaciones ubicadas en el Aeroparque Jorge Newbery. LAN ocupa un hangar desde 2008, cuando se firmó un acuerdo con una cláusula que establece que si el Gobierno requiere de las instalaciones, debe abandonarlas. La empresa sostiene que sin ese espacio se vería forzada a dejar de operar. Sin embargo, su presencia en el país data de 2005, tres años antes de contar con el hangar, período en el cual logró expandirse sin problemas e incluso fue distinguida por sus servicios. De hecho, a fines de 2008 ya concentraba el 30 por ciento del tráfico áereo. Incluso ahora la compañía realiza vuelos desde Ezeiza donde no tiene instalaciones fijas. Además, existen otras aerolíneas –como Sol, Gol y Andes– que operan sin hangares propios. Tampoco existen estas instalaciones en el interior del país, lo que rebate los argumentos de su necesidad ante desperfectos de los aviones.

La Orsna intimó el miércoles a la empresa de capitales chilenos para que en diez días desaloje el hangar que ocupa en la terminal metropolitana (ver aparte). El CEO de LAN, Ignacio Cueto, aseguró que la compañía tendrá dificultades para trabajar en operaciones de cabotaje, ya que el hangar es utilizado para guardar y reparar aviones. “Sólo queremos seguir invirtiendo y competir con lealtad, no queremos subsidio. No se trata de un capricho. No podremos seguir operando los vuelos domésticos”, se sumó Agraz. El titular del Orsna, Gustavo Lipovich, recalcó, en cambio, que LAN podrá continuar operando en el Aeroparque metropolitano. Además, aclaró que la misma disposición de mover los hangares en Aeroparque se les aplicó a las aerolíneas Baires Fly, Royal Air, Servicios Aéreos Sudamericanos, Private Aviation Consulting, Tango Jet y Mac Air, detalló Lipovich.

“Es mentira que no se pueda operar sin hangar. Sólo es más costoso. Es un tema de rentabilidad. Hay un montón de líneas aéreas que operan sin hangar y, de hecho, en el interior del país ocurre todo el tiempo”, señaló a este diario el titular de la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA), Pablo Biró. “Si cada aeropuerto tuviese que contar con hangares para todas las líneas que operan, no serían aeropuertos sino ciudades. A veces una terminal tiene hasta 30 líneas”, explicó. La empresa sostiene que la imposibilidad de contar con un hangar en Aeroparque complica la operatoria en caso de un desperfecto, porque el avión no puede ir a Ezeiza para su arreglo. “Si un motor se rompe, sin importar si es en Aeroparque, en Salta o Mendoza, lo que suele hacerse es enviar el repuesto hasta la terminal y se arreglan en las áreas de mantenimiento comunes”, explicó. La empresa no tiene hangares en el interior del país ni en Ezeiza, pese a eso opera desde estos destinos.

LAN Argentina tiene presencia en los vuelos domésticos desde junio de 2005, luego de comprar Aero 2000 y absorber parte de los empleados de Lafsa. Durante los tres años siguientes, logró destacarse en el país sin contar con hangares propios. De hecho, recibió el premio a la Calidad de Productos y Servicios de la Asociación de Ejecutivos de Mendoza; el premio Bitácora Oro, en la categoría línea área nacional de la industria del turismo, y la revista Mercado la distinguió como la mejor aerolínea de cabotaje y la segunda de América latina, detrás de LAN Chile.

A su vez, a partir de abril de 2007 se integró a la alianza OneWorld, sumando así sus servicios a los de otras diez líneas áreas del mundo, tales como British Airways, American Airlines y Qantas. Actualmente mantiene una participación cercana al 30 por ciento del mercado de cabotaje. Para la compañía, los ingresos por ventas en el país representan el tercer puesto en ranking de ganancias, con el 11 por ciento, luego de Chile (25 por ciento) y Estados Unidos (20 por ciento).

El titular de Aeropuertos Argentina 2000, Eduardo Eurnekian, aseguró que mover una línea “es cotidiano y sucede en todas partes del mundo”. El empresario consideró que el traslado es incluso beneficioso para que el servicio de trasbordos y conexiones sea más ágil. “Lo que está haciendo el Estado es un derecho que tiene”, sostuvo. El empresario consideró que “no se puede darle a una aerolínea diez días para que desaloje”. “Eso es lo que está mal, no que el Estado defienda su potestad”, dijo Eurnekian en declaraciones radiales.

La norma de la Orsna para reorganizar el uso de los hangares fue publicada en noviembre de 2012 y las empresas estuvieron habilitadas desde entonces para realizar sus mudanzas a aeropuertos alternativos, como San Fernando o Ezeiza. De los ocho hangares alcanzados por la medida, el Orsna logró relocalizar cinco en los aeropuertos de Ezeiza y San Fernando, luego de acordar con las empresas.