A partir de la publicación de ayer en el Boletín Oficial de Neuquén, entró en vigencia el acuerdo de YPF y esa provincia para explotar hasta 2048 yacimientos no convencionales en Loma La Lata y Loma Campana. Esta nueva concesión y extensión de plazos era necesaria para cerrar el vínculo contractual entre la petrolera estatal y Chevron. La multinacional invertirá 1240 millones de dólares en los próximos doce meses.

Mediante un decreto, con la firma del gobernador Jorge Sapag y sus ministros, el Poder Ejecutivo neuquino promulgó la ley que aprueba el acuerdo de la provincia con YPF, donde se incluyen temas impositivos y de medioambiente, entre otros. Se trata de un acta que había sido suscrita a fines de julio por Guillermo Coco, el ministro de Energía y Servicios provincial, y la empresa que dirige Miguel Galuccio.

A pesar de la rúbrica de este documento, las tensiones en torno de la explotación del reservorio de hidrocarburo no convencional continúan en aumento. “Existen lobbies contra el emprendimiento de Vaca Muerta”, denunció Sapag, dirigente del Movimiento Popular Neuquino. El funcionario mencionó que sectores exportadores utilizaron un argumento ecológico para atacar este negocio petrolero. Y aclaró que la provincia funciona con las normas más estrictas del país en materia de cuidado medioambiental. Asimismo, el gobernador apuntó que para un país que gasta un millón y medio de dólares por hora en importación energética la explotación de Vaca Muerta adquiere una fuerte relevancia.