ECONOMíA
› EN ITALIA, LAVAGNA PROMETIO NO DISCRIMINAR A INVERSORES MINORISTAS EN DEFAULT
Niños de Wall Street no serán privilegiados
Lavagna aseguró ante el vicecanciller italiano y tenedores de bonos argentinos en default que la propuesta de reestructuración se presentará luego de sellar el acuerdo con el FMI. Y que los intereses de Wall Street no estarán por encima del de Argentina.
En su primer día en Italia, Roberto Lavagna les dejó un mensaje claro a los inversores de ese país: la Argentina les hará una propuesta para salir del default recién cuando se logre un acuerdo con el Fondo Monetario. La idea del ministro, que reiteró durante su estadía en la ciudad de Rimini, es publicitar el menú de opciones de reestructuración de la deuda en la tercera semana de setiembre en Dubai, cuando se desarrollará la Asamblea Anual del FMI y el Banco Mundial. “La propuesta tendrá por delante los intereses del país a los de Wall Street”, aseguró Lavagna. El gobierno italiano no dejó escapar la oportunidad para ejercer presión.
Lavagna viajó a Italia para participar del encuentro cultural que cada año organiza el movimiento católico Comunión y Liberación, un encuentro que cuenta con el apoyo del Vaticano. El titular del Palacio de Hacienda encabezó una conferencia titulada “Argentina, señal de recuperación”.
Durante sus contactos, Lavagna hizo esfuerzos por llevar tranquilidad a los italianos que en la década del ‘90 adquirieron títulos de deuda argentinos que el país dejó de pagar a comienzos de 2002. Y no pudo evitar la marca a presión del propio gobierno italiano, preocupado por la suerte de sus ciudadanos. El vicecanciller de ese país, Mario Baccini, dijo que está “convencido de que el ministro argentino mantendrá los compromisos asumidos”. Es decir, retomará los pagos de la deuda cuanto antes.
Italia es uno de los países más afectados por la cesación de pagos de la Argentina. En total existen 350.000 pequeños inversores con bonos impagos. Se calcula que esos ahorristas reúnen 13.500 millones de dólares en títulos emitidos hasta el 2001, algo más de la mitad de lo que, en total, acumulan los inversores europeos. Los inversores italianos están organizados y cuentan con una página propia en Internet desde la cual se publicitan las novedades sobre el default argentino. Otro de los países perjudicados en una magnitud importante es Alemania.
En su exposición, Lavagna aceptó que setiembre “será crucial” para la Argentina. En primer lugar porque existe un vencimiento de la deuda impostergable con el FMI, por 3200 millones de dólares. Dos semanas más tarde, el día 23, está previsto que el Gobierno presente sus propuestas de reestructuración durante la Asamblea anual del FMI-BM. La novedad es que ayer Lavagna condicionó esa agenda a que finalmente se firme el convenio con el Fondo.
En este marco, el vicecanciler italiano puntualizó los dos temas pendientes en la agenda de ambos países: la reestructuración de la deuda y las tarifas de los servicios públicos. “Constituyen una prioridad del gobierno italiano en las relaciones con Argentina”, definió el funcionario. Lavagna se reunió con el vicecanciller, distintos legisladores y con los ex primeros ministros Giulio Andreotti y Massimo D’Alema.
Durante su alocución, Lavagna precisó que habrá diversas opciones para los inversores de bonos en default. Expuso que, por ejemplo, se podrá elegir entre distintas tasas de interés que devenguen los nuevos títulos o la ampliación del período de amortización de la deuda. En línea con los pronunciamientos de Néstor Kirchner, el ministro aseguró que “no existe una solución al problema de la deuda sin un crecimiento sostenido de Argentina”. Y mencionó que la negociación con el FMI debe garantizar que la economía pueda crecer a un nivel anual del cuatro por ciento. En ese momento aclaró que los intereses del país están por delante de los de Wall Street.
También aprovechó su intervención para comentar la situación actual. Estimó una expansión del Producto del 5,5 por ciento para este año, con una inflación anual en torno al 6 por ciento. “La situación social está mejorando”, remató Lavagna, al recordar la caída en la tasa de desempleo y al asegurar una recuperación de las inversiones. El ministro, que tiene previsto regresar mañana a Buenos Aires, aseguró que todos los inversores recibirán un trato igualitario durante el proceso de renegociación. “De los más grandes a los más pequeños, de los institucionales a los privados, todos serán tratados sobre una base de igualdad y de modo equitativo”, prometió.