El saldo de la balanza comercial ascendió a 926 millones de dólares en abril, cuando había sido de 994 millones de dólares en el mismo mes del año pasado (-6,8 por ciento), al tiempo que acumuló en el primer cuatrimestre 1047 millones de dólares, contra 2494 millones del 2013 (-58,0). Así lo precisó ayer el Indec. El resultado del mes pasado se debió a la caída de importaciones por el menor movimiento de la economía local. También al incremento de las exportaciones del complejo sojero, gracias a la merma de la incertidumbre cambiaria y a elementos estacionales. El superávit comercial de abril explicó casi 90 por ciento de las ganancias del año.

En abril, las importaciones sumaron 5472 millones de dólares, con una caída de 14 por ciento en relación con el mismo mes del año pasado, mientras que en lo que va de 2014 ascendieron a 21.228 millones de dólares, con una contracción del 5 por ciento interanual. En el detalle se precisó que el despacho de bienes de capital ascendió a 966 millones de dólares, cuando había sido de 917 millones durante 2013. A diferencia de este desempeño, las operaciones de bienes intermedios sumaron 1577 millones de dólares, contra 1686 millones del año pasado; las de combustibles y lubricantes ascendieron a 932 millones de dólares, contra 1065 millones; las de piezas y accesorios para bienes de capital computaron 1106 millones, contra 1421 millones; las de bienes de consumo registraron 546 millones de dólares, contra 627 millones, y las de vehículos totalizaron 327 millones de dólares, contra 649 millones.

En cuanto a las exportaciones, se computaron 6398 millones de dólares el mes pasado, con un retroceso del 13 por ciento respecto del mismo mes del 2013, mientras que acumularon entre enero y abril 22.275 millones de dólares, con una caída del 10 por ciento interanual. En la descripción por bloque de exportación se identificó que las manufacturas de origen agropecuario sumaron 2731 millones de dólares en abril, cuando habían sido de 2466 millones de dólares el año pasado. En cambio, el complejo de productos primarios anotó ventas por 1619 millones de dólares, contra 2292 millones de dólares del 2013; el rubro de manufacturas de origen industrial computó 1725 millones de dólares, contra 2283 millones, y el segmento de combustible y energía registró 322 millones de dólares, contra 331 millones. A su vez, en lo que se refiere al detalle por tipo de productos se destacó la performance de las ventas de harina y pellets de soja, las cuales pasaron de 2763 a 3538 millones en el primer cuatrimestre respecto del mismo período del año pasado.

La disminución de las exportaciones locales requiere observar que el tipo de cambio computó un alza del 53,9 por ciento durante los últimos doce meses. Los beneficios de la competitividad cambiaria no generaron un aumento directo del volumen de despachos al mundo. Economistas heterodoxos indican que, a diferencia de los argumentos convencionales a favor de una devaluación para estimular el intercambio comercial, las exportaciones de Argentina no se relacionan con el valor del dólar, sino con el mayor o menor dinamismo de la economía mundial.

Un informe de la Organización Mundial del Comercio refuerza esta posición. “La tasa de crecimiento del 4,7 por ciento del comercio de mercancías previsto para 2014 se sitúa por debajo del promedio del 5,3 registrado en los últimos veinte años (1993-2013) y por debajo del promedio del 6 por ciento alcanzado en los años anteriores a la crisis (1990-2008)”, dice la OMC. La situación se observa claramente en el bloque automotor, donde las exportaciones bajaron en abril 24 por ciento, por el estancamiento de la economía brasileña.