El sector de la construcción volvió a revalidar títulos, al mostrarse como uno de los sectores más dinámicos de la economía. En julio, la actividad creció 4,5 por ciento en relación con el mes anterior, mientras que mostró un crecimiento del 43,3 por ciento en comparación con julio de 2002. En los primeros siete meses del año, el incremento alcanzó al 37,1 por ciento.
De acuerdo con el informe oficial del Indec, la recuperación se sustentó “con la obra privada, edificios destinados a vivienda y otros destinos”, como las ampliaciones y refacciones de hogares.
Las ventas de insumos para la construcción también registraron aumentos elocuentes, siempre en comparación con junio: en cemento, el alza resultó del 13,4 por ciento, mientras que en pinturas trepó al 26,9 por ciento, y al 13 por ciento en el caso del expendio de ladrillos huecos. Uno de cada tres empresarios cree que la expansión se consolidará. Sólo el 8 por ciento tuvo una visión negativa.