ECONOMíA
› LAS TEXTILES Y LA IMPORTACION
Brasil, ese fantasma
A pesar de mostrarse como uno de los sectores más dinámicos después de la devaluación, las industrias textiles están denunciando complicaciones por culpa de las mayores importaciones desde Brasil. La Fundación Pro-Tejer, que aglutina a empresas del sector, advirtió que las fábricas utilizaron un 10 por ciento menos de su capacidad de producción entre mayo y agosto por efecto de las mayores compras al vecino país. El temor principal refiere a las toallas y frazadas que están importando las cadenas de supermercados.
Según los empresarios, el incremento en las importaciones se dio por la revaluación del peso de los últimos meses en el marco de un proceso recesivo en Brasil. Los industriales aseguran que los productos que no se absorben en el mercado interno brasileño son colocados a bajos precios en la Argentina, cuya economía se encuentra en franca recuperación, lo mismo que el nivel de consumo.
La merma del 10 por ciento en la capacidad productiva del sector “confirmó oficialmente lo anticipado en los últimos 60 días por la Fundación Pro-Tejer sobre la invasión de productos brasileños en la agroindustria textil”, dstacó un comunicado difundido por la asociación empresaria.
La última información oficial que dio a conocer el Indec también indicó que, en general, la industria textil creció entre enero y agosto el 99,4 por ciento, con picos del 110,6 en fabricación de tejidos y del 75,5 por ciento en la confección de hilados de algodón.
El propio organismo oficial dio cuenta, en su último trabajo, de que la recuperación de las importaciones textiles “ha preocupado a los funcionarios del sector”. En un contexto donde la recuperación textil había permitido “a varias empresas del sector reincorporar a las plantas productivas a operarios que estaban suspendidos”, reseñó el Indec.