Durante un operativo llevado a cabo en una exclusiva playa de Pinamar, se detectaron más de 400 motos de agua y jets esquíes que se encontraban sin declarar ante el fisco de la provincia de Buenos Aires. Un centenar de inspectores de la Agencia de Recaudación bonaerense (ARBA) realizó ayer en la selecta playa La Frontera trabajos de fiscalización, que dieron como resultado que el 98 por ciento de las embarcaciones de este tipo relevadas evadía el pago del Impuesto a las Embarcaciones Deportivas, por el equivalente a unos dos millones de pesos anuales. También se fiscalizaron automotores y se retuvieron doce camionetas doble tracción, cuyos propietarios registraban un importante nivel de deuda en el Impuesto a los Automotores.

Con el objetivo de controlar el nivel de cumplimiento impositivo en los sectores de altos ingresos, desde la agencia de recaudación provincial llevan a cabo desde el inicio de la temporada distintos operativos en los puntos turísticos más representativos y sobre activos de alta gama. Tal es el caso de las motos de agua, que generalmente se utilizan sólo en vacaciones, por lo que suele ser habitual que no estén al día con los tributos respectivos. El operativo realizado ayer en una playa exclusiva de la costa atlántica fue un claro ejemplo de esta práctica, donde casi todas –el 98 por ciento– de este tipo de embarcaciones deportivas tenían deuda impositiva o no estaban registradas.

“Los propietarios fueron intimados porque no cumplían con su obligación de registrarlas ante el fisco”, aseguró el titular de ARBA, Iván Budassi, quien comandó el operativo. Según explicó, “estos contribuyentes nunca pagaron el tributo a las embarcaciones, por lo que la maniobra de evasión alcanza los 2 millones de pesos por año”. Los que recibieron las intimaciones deberán declarar sus vehículos de agua y abonar los impuestos impagos. En caso de que no lo hagan, ARBA los incorporará de oficio a sus bases de datos y aplicará las multas correspondientes. Budassi sostuvo que “se trata de un tributo con un nivel importante de incumplimiento, por eso estamos desarrollando acciones concretas sobre este sector de contribuyentes para mejorar la cobrabilidad del impuesto”.

El trabajo de los inspectores de ARBA se desarrolló en conjunto con la Jefatura de Gabinete provincial, que conduce Alberto Pérez. Durante la fiscalización en la playa La Frontera, se retuvieron 12 camionetas doble tracción, cuyos propietarios registraban un importante nivel de deuda en el Impuesto a los Automotores. Estos contribuyentes abonaron lo que debían en el acto, pagando con tarjeta en un puesto móvil de ARBA que se encontraba en el lugar, y recobraron la posesión de sus rodados. Con esta labor de control, la agencia recuperó más de 250 mil pesos en concepto de patente.

El operativo utilizó cámaras móviles que leen los dominios (patente) de los rodados y cruzan datos online para identificar a los contribuyentes morosos. Entre los vehículos retenidos había distintos modelos de la marca Jeep, Toyota, Volkswagen, BMW y Mitsubishi, entre otros, valuados en más de 350 mil pesos. En todos los casos poseían deudas tributarias superiores a los 20 mil pesos.

Por su parte, el ente provincial continúa con las acciones conjuntas con la AFIP en comercios, balnearios y restaurantes de la costa atlántica para controlar que cumplan con la exigencia de aceptar pagos con tarjeta de débito, tal como lo establece una norma del ente recaudador nacional que se encuentra vigente desde 2001. Cuando en sus controles en la costa los fiscalizadores de ARBA detectan establecimientos que no aceptan pagos con tarjeta de débito, intiman al responsable del local y le dan un plazo de diez días para instalar una terminal electrónica y evitar sanciones, según explicaron desde ARBA. Los operativos se intensificaron luego de que se denunciara que en la costa sólo se acepta efectivo, lo que hizo colapsar los cajeros automáticos.