El ministro de Economía, Axel Kicillof, descartó ayer un eventual cambio en el Impuesto a las Ganancias al asegurar que “no es el tema principal para discutir de cara al movimiento obrero”. “Es una agenda creada por los medios hegemónicos”, dijo el funcionario, quien indicó que sólo el 11 por ciento de los trabajadores registrados de la Argentina tributan ese impuesto. Kicillof sostuvo además que muchas veces escucha “irresponsablemente a ciertos candidatos de la oposición que prometen y prometen”. “¿Qué es lo que prometen? Bajar los recursos y aumentar los gastos, para eso dicen ‘no vamos a cobrar retenciones, no vamos a cobrar impuestos a los altos ingresos. Vamos a subir las jubilaciones, vamos a sostener la AUH’. ¿Ahora, cómo lo van a hacer?”, se preguntó. “O son hechiceros o tienen un plan que deberán explicar a la gente antes de seguir prometiendo. Yo digo esto porque algunos economistas vinculados a candidatos estuvieron diciendo que hay que devaluar. Me parece que la bomba la están armando ellos. Quieren generar un clima que justifique el ajuste”, agregó.

Kicillof aludió de esta forma a una nota publicada el viernes en Clarín en la que se pone en boca del titular de la UIA, Héctor Méndez, que las medidas que lleva adelante el Gobierno son “un plan bomba” del que tendrá que hacerse cargo la administración que surja de las próximas elecciones. El ministro precisó que –a través de mensajes de texto– consultó sobre ese artículo a Méndez y que el dirigente fabril rechazó haber dicho eso. A su vez, señaló que Méndez le señaló que no iba a salir a desmentir la nota bajo el argumento de que sería “darle demasiada importancia a un tema que es intrascendente”. El ministro explicitó su desacuerdo con esa posición al sostener que “si dicen que yo digo algo contra vos, yo lo desmiento, porque no me gusta que a mí me usen. Por eso a mí lo que un poco me preocupa es ver a la UIA arrodillada o absolutamente dominada por los intereses de Magnetto. Eso me preocupa”.