El Gobierno renovó los convenios bilaterales del Programa Federal de Desendeudamiento, que permitirá a las provincias postergar el vencimiento de pagos por un monto total de 1800 millones que debían realizar en el segundo trimestre. “Cuando Néstor (Kirchner) llegó (a la Presidencia) había once monedas distribuidas entre las provincias. El empezó devolviéndole a cada una de las provincias la identidad de que pertenecían a un país donde circulaba una sola moneda. Nosotros, en 2010, comenzamos con el Plan de Desendeudamiento, eliminamos el índice CER (que actualizaba las deudas) y refinanciamos esos pasivos a largo plazo con una tasa bajísima”, señaló la Presidenta, Cristina Fernández, acompañada por el ministro de Economía, Axel Kicillof, en el acto que encabezó en el Salón Mujeres Argentinas de la Casa Rosada.

El período de gracia para las deudas provinciales se amplió hasta el 30 de junio. A partir de allí, serán 185 cuotas iguales, mensuales y consecutivas a una tasa de interés fija del 6 por ciento, lo que representa una transferencia implícita de recursos de Nación a los distritos. Desde la creación del Programa, en mayo de 2010, se reestructuraron 64.864 millones de pesos de stock de deuda. También se amplió el plazo de cancelación, de ocho a treinta años. El gobierno federal, además, redujo nominalmente las deudas a través de la distribución de 22.392 millones de pesos mediante Aportes del Tesoro Nacional (ATN). En esta oportunidad, se extendió, nuevamente, el plazo de gracia.

“Esta medida nos permite mejorar la capacidad financiera de las provincias. Los recursos propios que ahora se liberan pueden invertirse en el desarrollo y en políticas sociales”, señaló la ministra de Economía bonaerense, Silvina Batakis. El gobernador de Santa Cruz, Daniel Peralta, dijo a su vez que “el programa de desendeudamiento nos viene muy bien, nos permite enfocarnos en otras variables económicas de la provincia”.

En tanto, Ricardo Colombi, gobernador de Corrientes, calificó la medida de “importante, porque permite proyectar un segundo semestre un poco mejor en materia económica”. También elogiaron la postergación de vencimientos los mandatarios de Neuquén, Jorge Sapag, y de Chubut, Martín Buzzi.

CFK puso el ejemplo de la mejora financiera de Misiones. Según le informó el gobernador, Maurice Closs, la provincia mesopotámica “en 2007 tenía un presupuesto de 3215 millones de pesos y recibían nada más que 3572 millones”. “Se ve clarito que es mínima la diferencia entre lo que ejecutaban y lo que recibían de Nación en concepto de todo lo que es desendeudamiento, coparticipación, todos los ingresos de los planes sociales, etcétera”, indicó la mandataria. “En 2015 está con un presupuesto de 33.000 millones de pesos y con una deuda de 3630 millones, prácticamente la misma que en 2003. Antes, la deuda se llevaba el 90 por ciento del presupuesto, ahora el 11 por ciento. En definitiva, a las provincias que han sabido administrar les pasó lo mismo que al país. Nos hemos desendeudado y, al desendeudarnos, podemos trabajar y darles mayores bienes a nuestra comunidad”, señaló CFK.