El presidente brasileño, Fernando Henrique Cardoso, pidió comprensión ayer a Washington para que destrabe la ayuda financiera a la administración Duhalde. “Antes de que la Argentina diera señales más claras de que había encontrado un camino, entiendo que los organismos internacionales se mostrasen escépticos, pero en las últimas semanas se vio un gran empeño por parte del Gobierno y el pueblo de ese país para buscar un camino”, afirmó Cardoso. “Es claro que no se puede exigir más en ciertas circunstancias”, aseguró.
Como nunca antes, el presidente brasileño salió a defender al Gobierno argentino, ante la negativa del Fondo y el Tesoro norteamericano para acelerar los trámites por la asistencia financiera. “¿Cuántas negociaciones basadas en una especie de mentira, una mentira consentida por la parte poderosa, cuando sabíamos que no se iba a cumplir?”, recordó Cardoso, en referencia a los acuerdos alcanzados en la última década entre el FMI y la Argentina. “Pero ahora la Argentina no quiere disimular; ya hizo algo y dice: ayúdennos a dar un paso más”, dramatizó, mejorando el propio discurso de Duhalde. “Debemos ser solidarios y prestar apoyo a la Argentina, a condición de que siga el camino necesario. Debemos ser solidarios con nosotros mismos y darle apoyo a la Argentina”, concluyó.
El ministro de Economía español, Rodrigo Rato, también pidió que el FMI respalde al país. Pero con un lenguaje mucho más diplomático y cauteloso: “Es indudable que la situación de la Argentina es grave y que requiere de ayuda lo antes posible de las instituciones financieras internacionales”, dijo. “Ese acuerdo entre el FMI y la Argentina en estos momentos depende -en mi opinión– prácticamente en exclusiva de que el Gobierno (de Eduardo Duhalde) cierre el presupuesto y que con ello lleguen a un acuerdo sobre la futura sostenibilidad de las finanzas públicas argentinas”, agregó. Sin embargo, como es sabido, pese a que el Presupuesto ya fue aprobado y a que se alcanzó un acuerdo con los gobernadores para recortar el gasto provincial, el Fondo sigue inflexible.
Dicho sea de paso, Rato aprovechó su paso por la cumbre de Fortaleza para solicitarle a Remes Lenicov “igualdad” en el trato de las empresas españolas que operan en la Argentina.