La actividad de la construcción anotó un crecimiento del 4,2 por ciento en agosto respecto del mismo mes del año pasado. En lo que va del año, la actividad sectorial evidencia un crecimiento del 7,8 por ciento con respecto a los primeros ocho meses del año anterior, consignó el Indec. La edificación de vivienda privada y la ampliación y refacción de establecimientos productivos fueron los bloques de la rama que explicaron la suba del mes pasado. La construcción petrolera, la obra vial y otras obras de infraestructura a cargo del sector público, a diferencia del desempeño de la primera parte del año, mostraron una disminución de la actividad. El despacho de cemento en el mercado interno, en tanto, anotó un record histórico en los primeros ocho meses del año, mientras que el empleo registrado de las constructoras se ubicó en el nivel más alto de la última década.

La construcción, si bien desaceleró su crecimiento respecto de las tasas de dos dígitos observadas en junio y julio, continúa expandiéndose para compensar las distorsiones de la actividad del año pasado, cuando la especulación con el tipo de cambio y la tensión de precios afectaron los negocios del sector. En agosto, el segmento de viviendas para los particulares registró una suba del 6,4 por ciento respecto del mismo mes del año pasado. El programa de créditos subsidiados Procrear fue un elemento relevante para explicar la expansión del bloque, donde se destacaron tanto el incremento de las líneas de construcción individual como las de desarrollo urbanístico.

El segmento de edificaciones privadas para uso productivo en ampliación y renovación de fábricas también registró un crecimiento, al elevarse 1,4 por ciento el mes pasado en relación con igual mes del 2014. La inversión de los empresarios, según los registros de cuentas nacionales del Indec para el segundo trimestre, muestra fuerte expansión interanual, donde las construcciones lideraron la formación de capital.

El bloque de obras viales, a diferencia de los rubros anteriores, anotó una baja del 3,4 por ciento, mientras que el sector de otras obras de infraestructura registró una caída del 2,1 por ciento. Estas mermas no fueron menores, puesto que las edificaciones del sector público tienen un peso relevante en el conjunto de la construcción. El bloque de obras petroleras, en tanto, anotó una baja del 4 por ciento, lo que se explicó por una reducción en los metros perforados, que en los primeros siete meses del año sumaron 151.580 metros, contra los 237.866 metros de igual período del año 2014, al tiempo que se computó una caída en la cantidad de pozos terminados.

El empleo formal de la construcción, tras las moderaciones observadas el año pasado por la reducción de los negocios del sector, alcanzó un pico de 442.484 individuos en el segundo trimestre, contra los 407.158 trabajadores del mismo período del año pasado, el equivalente a un alza del 8,7 por ciento interanual. Las provincias del Norte del país, según las estimaciones de la Cámara de la Construcción, fueron la región del país con mayor creación de empleo en construcción en los últimos meses. Las transferencias de capital del Gobierno a provincias fueron recursos claves para explicar el crecimiento de las obras de infraestructura en las localidades norteñas.