La facturación de los supermercados y las ventas en los shoppings registraron durante septiembre aumentos reales interanuales del 7,6 y 17 por ciento, respectivamente. Los datos divulgados ayer por el Indec ofrecen una aproximación al dinamismo del mercado interno. El consumo privado representa uno de los principales sostenes para la actividad económica en el actual escenario de viento de frente desde el sector externo donde se destaca la recesión brasileña, el menor crecimiento chino y la caída en los precios internacionales de las materias primas.

En las grandes cadenas supermercadistas relevadas por el organismo estadístico, el incremento nominal acumulado entre enero y septiembre en las ventas fue de 28,1 por ciento. Ese comportamiento estuvo impulsado por los rubros Indumentaria, calzado y textiles para el hogar, Bebidas, Artículos de limpieza y perfumería, y Lácteos. Por su parte, en los shoppings las ventas registraron un alza del 35,6 por ciento durante los primeros nueve meses de 2015. Entre los 37 centros de compras relevados por el Indec los ítems más consumidos corresponden a los sectores Electrónico, Juguetería, Diversión y esparcimiento, Patio de Comidas y Amoblamientos. El impulso a las ventas fue más fuerte entre los shoppings ubicados en el Gran Buenos Aires que en aquellos localizados en la Capital Federal.

El impulso a la demanda local proviene, entre otros elementos, de la implementación de los aumentos salariales acordados en paritarias, la actualización de las jubilaciones, el incremento en la asignación universal y las distintas iniciativas estatales de impulso al crédito para compra de electrodomésticos.