La economía brasileña se contraerá 3,05 por ciento este año, en tanto que la inflación llegará a 9,91 por ciento en 2015, según las proyecciones de distintas consultoras privadas que recoge periódicamente el Banco Central de Brasil. Estas nuevas previsiones, que figuran en el informe semanal de la autoridad monetaria, son ligeramente más pesimistas que las de la semana pasada, cuando se preveía una caída del Producto Interior Bruto de 3,02 por ciento y una inflación de 9,85 por ciento para el cierre del año en curso. A su vez, para 2016, las previsiones auguran una contracción de la economía de 1,51 por ciento y una inflación de 6,29 por ciento. A su vez, se informó ayer que el intercambio comercial de la Argentina con Brasil registró en octubre un saldo negativo para la economía local de 226 millones de dólares, en un contexto en que las ventas argentinas de redujeron 27,4 por ciento interanual, mientras que el volumen de importación retrocedieron 8 por ciento.