“La administración del comercio en los últimos diez años evitó la desindustrialización del país”, dijo ayer Paolo Rocca, el presidente del Grupo Techint, una de las empresas multinacionales más importantes de la Argentina. El empresario, pese a haber hecho públicas sus diferencias con la política económica del Gobierno, reconoció que hubo importantes administraciones comerciales, es decir control a las importaciones, lo cual fue central para sostener la capacidad de producción local. Alfredo Coto, otro empresario que en los últimos años no tuvo buena relación con el oficialismo, luego de que Néstor Kirchner lo acusara de generar tensiones de precios a mitad de la década pasada, destacó ayer que los niveles de consumo recuperaron dinamismo en los últimos meses, a partir de políticas públicas expansivas a favor de la demanda. A su vez, empresarios de la pequeña industria que fabrican para el mercado interno mostraron preocupación en relación con las políticas que podría tomar una eventual gestión de Cambiemos.

Rocca aseguró que la administración del comercio exterior fue central para conseguir el dinamismo industrial de los últimos años. “El producto industrial respecto del PBI se mantuvo en el orden del 17 por ciento. Ahora, a partir de la caída del crecimiento chino, aparecen nuevos desafíos que pasan por generar inversiones a través de la iniciativa privada, por lo que se abren nuevas oportunidades”, aseguró. Coto, mientras tanto, dijo que “el consumo de productos masivos viene bien en 2015”, aunque mostró algo de incertidumbre respecto de 2016: “Vamos a ver qué pasa”.

La situación de preocupación en relación con medidas económicas que puedan afectar el consumo interno (por caso, una fuerte devaluación que se traslade a los precios, en particular, de los alimentos) no sólo se observó en grandes empresarios sino que fue uno de los puntos más repetidos por referentes de pymes locales. “El panorama que se ve es sombrío. Hay que entender que no se puede liberar la economía de la manera que lo quiere hacer esta gente (por Cambiemos) y en lo que va a redundar todo esto es en mucha problemática para las pequeñas y medianas empresas”, dijo Eduardo Logiudice, de la empresa de tintorería industrial Italcolore.

Desde la Unión Industrial de Berazategui aseguraron que implementar una política de libre mercado perjudicaría fuertemente a la actividad. “Nosotros compramos energía al valor del dólar oficial. Si el tipo de cambio sube a 15 pesos ese costo se traslada a la producción y a los precios, y eso va a generar una gran recesión”, dijo Daniel Rosato, el vicepresidente de la entidad. Agregó que “es una mentira que los precios se fijen hoy de acuerdo con el dólar ilegal”.

El titular de la empresa Fametal Aceros, Augusto Santucho, advirtió que las políticas de devaluación y liberalización del comercio exterior son un riesgo para todas las firmas que producen para el mercado interno. “Nos reunimos en el parque industrial de Plátanos con empresarios y trabajadores y analizamos los riesgos que corremos ante un eventual triunfo de Cambiemos por las medidas que proponen de liberalización del comercio exterior y de devaluación, todos esos instrumentos económicos a los empresarios nacionales nos golpean muy fuertemente”, indicó.

Mientras tanto, el presidente de la Cámara de la Pequeña y Mediana Industria Metalúrgica (Camina), José Luis Ammaturo, dijo que “las pymes debemos ser el eje central de las políticas de desarrollo de los próximos años”.