ECONOMíA
› MAS BARRERAS PARA INGRESAR A ESTADOS UNIDOS
A pagar derecho de admisión
Son desde hace décadas los principales defensores de las políticas de libre comercio... para el resto del mundo, obviamente. A partir de la semana próxima, todas las exportaciones de alimentos hacia Estados Unidos enfrentarán nuevas barreras paraarancelarias para entrar al mayor mercado del planeta. Tal situación afectarán particularmente pymes argentinas.
En esta oportunidad la excusa será la nueva Ley contra el Bioterrorismo, sancionada por el Congreso norteamericano en octubre pasado para evitar un ataque a través de comida contaminada, pero que en términos prácticos entrará en vigencia el viernes próximo. De acuerdo con la norma, todos los exportadores hacia Estados Unidos deberán estar registrados ante la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés). Pero el principal requisito de la ley es contar con un representante con residencia permanente, tarea que la pueden desempeñar personas físicas, estudios de abogados, o los propios agentes importadores. Para la FDA el agente será “la cara” del exportador en el país y a él le transmitirán toda la información y reglamentaciones que determine el gobierno de los Estados Unidos. Algunos estudios en Estados Unidos ofrecen este servicio con precios que rondan entre 1000 y 2000 dólares al año. Pero, más allá del precio, hay quienes temen que la norma se transforme en una nueva barrera paraarancelaría, que acreciente las dificultades burocráticas para acceder al mercado norteamericano.
Tales medidas, según aseguran los empresarios del sector alimenticio, afectarían sobre todo a las empresas pequeñas y las que quieran iniciarse en la exportación a Estados Unidos, ya que las firmas que venden desde hace años podrán sortear con mayor facilidad los nuevos requisitos burocráticos.
Según datos del Indec, algo más del 25 por ciento de las exportaciones argentinas hacia Estados Unidos está constituido por alimentos, lo que equivale a unos 650 millones de dólares anuales. Todos los alimentos con algún tipo de procesamiento están alcanzando por la nueva regulación, aunque quedarán exceptuados los granos.
El viernes finaliza el plazo de inscripción ante la FDA para las empresas y exportadores, y desde ese día además deberán contar con un representante permanente en el país que será como la cara de la firma ante la administración Bush.
En la inscripción deberán informar datos sobre la empresa, dueños y marcas comerciales, entre otros puntos y quien no esté anotado, sencillamente, no podrá venderle al mayor importador mundial. Esta nueva “medida de seguridad” se suma a otras tomadas recientemente por Washington, como la Iniciativa de Seguridad en Containers, que obliga a escanear las cargas en los contenedores, y la denominada Regla de las 24 Horas, establece el requisito de informar con un día de antelación el arribo de un cargamento a un puerto estadounidense.