El Gobierno anunció el lanzamiento de una línea de créditos para los jubilados y pensionados que cobran sus haberes a través del Banco Nación (BNA), que podrán acceder desde marzo a créditos cuya cuota no superará la tercera parte de los haberes a tasa fija con plazos hasta tres y cinco años. A pesar de que se presenta como una novedad, en realidad se trata de la actualización de una línea ya existente del BNA, aunque se eleva el tope de los préstamos. El anuncio estuvo a cargo del titular de la entidad bancaria, Carlos Melconian. El economista además adelantó que “entre marzo y abril se anunciará una línea de créditos hipotecarios seria”.

En la página web del BNA está disponible desde hace varios años la información de una línea de créditos para jubilados y pensionados que no cuenta con cupo máximo, es decir, que están sujetos a la demanda del público. La relación cuota ingreso no puede superar el 30 por ciento, el monto mínimo es de 3 mil pesos y el máximo, de 60 mil pesos.

“El Banco Nación anunció una nueva línea de préstamos a tasa fija para jubilados que estará vigente a partir del 1º de marzo”, informó la entidad en un comunicado. La novedad luce más como una actualización. Los jubilados que cobran sus haberes a través del BNA podrán acceder a un crédito de un monto de hasta 70 mil pesos con una tasa fija del 18 por ciento anual o hasta 80 mil pesos con tasa fija del 20 por ciento anual. A modo de ejemplo, un jubilado que cobra la mínima de 4170 pesos podrá acceder a un préstamo de 33.500 pesos a pagar en 60 meses con una cuota mensual de 1250 pesos. Como en la línea vigente hasta ahora, la cuota mensual en ningún caso puede superar el 30 por ciento de los haberes.

En declaraciones radiales vinculadas a la coyuntura macroeconómica, Melconian consideró que “estaba muy convencido de los problemas que los precios relativos tenían en Argentina, que era el tipo de cambio y tarifas totalmente desalineadas. La represión cambiaria y tarifaria del último tiempo había sido fenomenal”. “Terminó el tiempo de poder convivir con inflación, la gente creía que con eso se podía convivir. Cuando el país se descapitaliza y cae muy bajo en productividad, le resulta muy difícil insertarse en el mundo. Esta es la derivación reprimida del año 2015”, agregó Melconian, en línea con la idea de asignar toda la responsabilidad por el salto inflacionario al gobierno anterior y de evitar vincular la caída de exportaciones con el derrape económico de Brasil, principal socio comercial del país.