ECONOMíA
› CREDITOS PARA PYMES CON EMPLEADOS EN BLANCO
Plata para regularizar empleo
El Gobierno busca incentivar con créditos a baja tasa el blanqueo de trabajadores en relación de dependencia. A partir de un acuerdo con el Ministerio de Trabajo, el Banco Nación otorgará créditos a pymes hasta un monto equivalente a la nómina salarial mensual de los empleados declarados ante la AnseS. Según un estudio de la cartera laboral, los establecimientos con hasta 25 trabajadores concentran el 87 por ciento del empleo no registrado (excluyendo el servicio doméstico). Para esa dimensión de empresas, además, hay una directa relación entre el acceso al crédito y el empleo en blanco, aseguran. Bajo esos parámetros, el Gobierno confía en que facilitándole el acceso al crédito a empresas que hoy no lo alcanzan por los exigentes requisitos bancarios, se alentará la contratación formal de nuevos trabajadores.
Los créditos se otorgarán hasta un máximo de 12 meses, a una tasa variable cuyo nivel actual es del 13,75 por ciento nominal anual, pero que se bonificará en un 15 por ciento en cada vencimiento “siempre que el cliente cancele los servicios de capital e interés en tiempo y forma”. El monto del préstamo podrá alcanzar hasta un valor equivalente a la nómina salarial de un mes, tomándose como base el promedio de los salarios declarados ante la AnseS en los seis últimos meses. El monto máximo del crédito por empresa o grupo económico es de 300 mil pesos. La empresa que tome un crédito se deberá comprometer a no producir despidos masivos durante su vigencia.
Sin duda, las condiciones resultarán atractivas para muchas pymes interesadas en obtener capital de trabajo y que, en las condiciones actuales, no son “sujeto de crédito” del sistema bancario. Sin embargo, todavía hay una fuerte restricción que limitará el número de empresas que puedan acceder a estos planes, y es que deberán estar en “situación normal” en su calificación crediticia (no podrán tener créditos anteriores en mora) y deberán estar al día en sus aportes previsionales e impositivos. El interrogante es cuántas empresas (hay 313 mil pymes inscriptas con hasta 25 trabajadores declarados) estarán en condiciones de superar ese “filtro”.
En el Ministerio de Trabajo destacaron que este sistema de aliento a la regularización del trabajo no registrado “es mucho más justo que las tradicionales moratorias o blanqueos, que tienden a premiar a los que evadieron y castiga, por comparación, a los que sí cumplieron sus obligaciones”. Además, estas experiencias no han demostrado, hasta ahora, mayores resultados.
La determinación de promover la regularización a través de facilidades crediticias surgió de los análisis realizados por la cartera laboral que demostrarían que los empresas empleadoras –fundamentalmente las mano de obra intensivas– utilizan fundamentalmente dos vías de financiación para su capital de trabajo:
- El crédito de proveedores para la compra de insumos;
- El descubierto bancario para el pago de salarios.
En consecuencia, en la medida en que se facilite el acceso al crédito de corto plazo y se abarate su costo de financiación, ello debería redundar inmediatamente en una mejora del empleo, sostienen los analistas de Trabajo. En la práctica, la línea de crédito habilitada por el Nación funcionará como un adelanto en cuenta corriente flotante; es decir, que se podrá renovar por el monto que se va cancelando.
En el Ministerio de Trabajo confían en que otros bancos se sumen a la iniciativa. Ya han conversado con Eduardo Hecker, titular del Ciudad, y Carlos Heller, gerente general del Credicoop, con buena acogida. Pero no descartan que la banca extranjera también adhiera al sistema. “En definitiva, si una empresa paga salarios en blanco y mantiene sus planteles, está demostrando una capacidad de pago mucho más elocuente que lo que puede ofrecer como resultado cualquier evaluación de riesgo, y sin el costo de esta última”, afirman los especialistas de la cartera laboral.