La ejecución presupuestaria de los programas del Estado nacional para promover específicamente el desarrollo del sector pyme fue entre enero y agosto de apenas el 17 por ciento. Si la ejecución respetara el grado de avance del año, debería estar en el orden del 67 por ciento. Se trata de partidas bajo la órbita del Ministerio de la Producción que tienen asignados 229 millones de pesos según presupuesto votado el año pasado pero de los que sólo se llevan ejecutados 39,3 millones de pesos. Los datos forman parte de un documento elaborado por la Asociación Pyme en base a información del Ministerio de Hacienda.

Hasta agosto el porcentaje de ejecución general del presupuesto nacional fue del 60 por ciento. Los programas con mayor grado de ejecución son los vinculados a las áreas seguridad. El Ministerio de la Producción, a cargo de Francisco Cabrera, ejecutó apenas el 36 por ciento del presupuesto. Es la cartera enfocada sobre la política industrial y el comercio exterior. En particular, los programas dedicados a estimular al sector pyme cuentan con una ejecución todavía menor.

“Las medidas del plan económico de Cambiemos perjudicaron a los emprendedores, a los pequeños y medianos empresarios. Pero lejos de contemplar un plan estatal para subsanar estos peligros, la subejecución presupuestaria demuestra la limitada política pública que el Estado Nacional aplicó de cara al sector Pyme en los primeros ocho meses de gestión”, planteó Daniel Moreira, titular de la Asociación Pyme.

Las transferencias a universidades nacionales dentro del programa de “Promoción de la Productividad y Competitividad PyME” está pautada para todo el año en 10,8 millones y hasta fines de agosto se había girado menos del 8 por ciento. Dentro de ese mismo programa, las transferencias al sector privado para financiar gastos corrientes, partida que cuenta con 100 millones de pesos asignados, sólo fue ejecutada en un 23 por ciento. De los 25 millones para financiar el pago a servicios técnicos y profesionales no se utilizó ni un peso. En el capítulo de transferencias al exterior de los 27 millones se utilizaron 8 millones (29 por ciento). En relación a las “Actividades comunes a los programas de la Secretaría de Emprendedores de las Pymes” el rubro servicios técnicos y profesionales cuenta con un presupuesto de 26 millones de los cuales se ejecutaron 11 millones (42 por ciento). En este último caso, se trata del porcentaje de utilización más alto, aunque todavía está por debajo del promedio del presupuesto nacional.

“Se trata de programas que generan capacitación en las pymes o habilitan el juego de otros organismos o instituciones para que puedan fortalecer a una cadena de valor pyme”, explican desde la Asociación Pyme. Hay también otras partidas que indirectamente benefician a las pymes no contempladas en este informe, que sólo se centra en los programas específicos para el sector. El documento también advierte la creación de nuevos programas, como el “Expertos Pymes”, oficializado el 28 de julio bajo la resolución 148/2016 que no aporta nuevo fondeo sino que redirige dinero de partidas presupuestadas en 2015.

El retaceo de la ejecución presupuestaria para el sector se da en un momento económico crítico a raíz de la caída de las ventas y la suba de costos asociados a la inflación y el tarifazo. Según Came, las ventas minoristas cayeron 7,7 por ciento en septiembre.

La subejecución presupuestaria no es una novedad en la gestión del PRO. En 2013 el gobierno porteño que encabezaba Mauricio Macri apenas ejecutó el 11,8 por ciento del programa de obras para el subte, el 18 por ciento para mejorar el tránsito y la mitad del presupuesto para encarar la crisis habitacional. Al año siguiente, dejó sin utilizar uno de cada cuatro pesos disponibles para la problemática de vivienda. A nivel nacional, este diario informó días atrás que el Ministerio de Educación al 30 de septiembre usó apenas el 11 por ciento de los fondos previstos para el programa de Innovación y Desarrollo de la Formación Tecnológica; el 19 por ciento de lo pautado para Infraestructura y Equipamiento; el 31 por ciento de lo presupuestado en Acciones Compensatorias y el 31 por ciento de la partida de Formación Docente.