ECONOMíA
Los franceses buscan comprador para sus acciones en Telecom
France Telecom se convirtió en la primera multinacional en reconocer su intención de irse de Argentina. Telecom Italia seguiría el mismo camino, y por ahora Telmex, del grupo Slim, surge como la más interesada.
› Por Raúl Dellatorre
Las declaraciones del presidente de France Telecom en París anunciando el interés por desprenderse de las acciones en la empresa Telecom Argentina hicieron correr un sudor frío por la espalda de las autoridades argentinas de la empresa. “Siempre somos los últimos en enterarnos”, le comentó un directivo local a un allegado, ayer, en una de las muchas comunicaciones telefónicas de consulta que recibieron en el edificio en torre de Alicia Moreau de Justo. France Telecom vendería sus participaciones en Argentina para compensar las pérdidas por sus inversiones en otras compañías de telecomunicaciones del mundo. Telecom Italia, socia de los franceses en Telecom Argentina y habitual rival en la disputa por el control de la firma, también se desprendería de sus acciones. Entre ambas suman el 54,74 por ciento del capital de la empresa local y todos los indicios señalan a la mexicana Telmex como el más firme aspirante a quedarse con el paquete de control de Telecom.
Tras informar pérdidas netas por 8280 millones de euros durante el año pasado, Michael Bon, presidente del directorio de France Telecom, anunció la intención de la compañía de abandonar sus inversiones en telefonía en Argentina. El resultado negativo de las operaciones del año pasado se explican, principalmente, por las pérdidas provocadas por sus inversiones en la británica NTL y la alemana MobilCom. Pero también debió provisionar (mandar a pérdidas) 360 millones de euros por el impacto de la devaluación sobre sus activos en Argentina. Con deudas por 60.700 millones de euros a fines del año pasado, la compañía mixta francesa apunta a desprenderse de diversos activos para bajar el nivel de exposición de su patrimonio.
Aunque la decisión de France Telecom se relaciona con las malas perspectivas para el negocio telefónico en Argentina en los próximos años, no es menos cierto que la estrategia de la empresa gala apunta a desarrollarse y crecer, fundamentalmente, en Europa y el Sudeste Asiático. Telecom Italia, en cambio, viene apostando fuerte en Latinoamérica, principalmente en Brasil. De allí el interés que expresó, en algún momento, por comprar la participación de su socio francés en Telecom Argentina y consolidar sus activos en el Cono Sur. De todos modos, FT se ha convertido en la primera empresa extranjera en anunciar su probable retiro del país tras el cambio de condiciones provocado por la caída de la convertibilidad. Y las últimas noticias señalan que Telecom Italia también habría cambiado de idea: en vez de ampliar su participación en Argentina, estaría pensando en vender la que tiene.
“No hay nada inminente”, aseguraron voceros de la firma gala, aunque ratificaron que la intención de la empresa está en el sentido indicado por el presidente de la firma: vender su participación en el capital de Telecom Argentina, que asciende a 27,4 por ciento. Por el porcentaje similar en manos de Telecom Italia, el miércoles se había dejado trascender el interés de la mexicana Telmex, del grupo Slim. Ahora se asegura que la misma firma azteca estaría interesada también, quizás de la mano de algún socio estadounidense, en el paquete que sacará a la venta FT.
Telmex ya cuenta con licencia para operar en Argentina, obtenida a favor la firma Techtel, que conformó asociada a Techint. Además del monopolio de la telefonía mexicana –que debió resignar tras diversas denuncias–, tiene una importante participación en el mercado estadounidense. No habrá una gran puja por entrar a un mercado con un panorama recesivo como el argentino, y con una tarifa que seguramente resultará castigada en términos de divisas. Por otra parte, Telecom Argentina exhibe un preocupante nivel de endeudamiento externo del orden de los 3200 millones de dólares, 900 de los cuales vencen este año. Otra alternativa barajada, ajena a la versión del interés mexicano, era la entrega del control accionario de la empresa a los bancos acreedores. No obstante, no se descarta que por una vía u otra –asociada a Telmex o a través de unaentidad acreedora–, las empresas de telecomunicaciones estadounidenses aprovechen la ocasión para hacer pie en la telefonía “grande” de Argentina. Ingreso que no consiguieron, como se recordará, al momento de la privatización de Entel.