Roberto Lavagna negó categóricamente que el Gobierno vaya a incluir los intereses “post-default” en la oferta de reestructuración de la deuda pública. “No hay nadie en el Gobierno ni en el Ministerio de Economía que avale esa posibilidad”, aseguró. El propio Néstor Kirchner ratificó que la postura en la negociación con los acreedores “no ha variado en nada” la propuesta de Dubai, que contempla una quita del 75 por ciento y el no pago de los intereses atrasados.
“Todo lo que se dice por ahí (en contrario) no es cierto. Nuestra postura es la misma, es absolutamente clara, de buena fe, racional”, dijo Kirchner en Casa de Gobierno. “No tenemos ni en vista tener otro esquema diferente del que hemos dicho a la sociedad”, enfatizó.
En las últimas semanas, distintos medios señalaron que Lavagna se guardaba un “as” en la manga para la negociación: aceptar el pago de una parte de los intereses en mora desde diciembre de 2001, los que ascienden a unos 18.000 millones de dólares.
Ayer, Lavagna primero y Kir- chner después desmintieron esa versión. “Tenemos la mejor buena fe, la mejor voluntad de conversar con todos, el mejor grado de apertura, pero esto que quede bien claro: nosotros no actuamos para la coyuntura sino que estamos tratando de salir del infierno con una construcción de política de perfil estratégico”, afirmó el Presidente.
El ministro de Economía, además, insistió con que “una carta importante” para alcanzar un acuerdo con los acreedores serán los nuevos bonos atados al crecimiento de la economía argentina. “No a la idea ni a la expectativa sino al crecimiento efectivamente producido”, explicó Lavagna, quien destacó que “esto está en la oferta” que presentó en setiembre del año pasado en Dubai. “Desde el vamos estuvo la iniciativa de ligar la posibilidad de recuperar un valor adicional de los acreedores al crecimiento argentino”, sostuvo.
Al respecto, admitió que “al principio lo recibieron con poco entusiasmo, pero ahora hay más gente que se interesa porque ven que efectivamente la Argentina tiene una capacidad de crecimiento importante”.
Para el ministro la oferta de los nuevos bonos “es una carta efectivamente muy importante, por muestra seriedad y voluntad de cumplir con las obligaciones, pero al mismo tiempo dice que el cumplimiento está ligado a poder cumplir con nuestra propia población”.
Por otro lado, al ser consultado sobre la marcha de las negociaciones con el Fondo Monetario y el vencimiento de 3100 millones de dólares que se debe efectivizar el 9 de marzo próximo, Lavagna respondió: “Hay que usar la semana que queda, hoy estamos mejor que hace dos semanas”.
El ministro resaltó, una vez más, la reunión mantenida hace dos semanas en Miami con el titular del Fondo, Horst Köhler, al explicar que ese encuentro “abrió un espacio de negociación”, luego del pedido formulado por el Grupo de los 7 en favor de que Argentina inicie conversaciones “amistosas” con sus acreedores privados.