A pocas horas de la partida de Néstor Kirchner hacia China, el Gobierno desmintió que ese país haya impedido el ingreso de soja argentina. La desmentida ocurrió luego de que una versión periodística diera cuenta del rechazo a un barco carguero con 50 mil toneladas de oleaginosa en el puerto de Shenzhen, al sur de China. Ayer por la tarde, la Cancillería difundió un comunicado. “Luego de consultar a nuestra embajada en China, (se) tomó conocimiento que la carga del buque estaba siendo transbordada sin novedad”, indicó la nota.
La semana pasada, China había impedido el desembarco de soja brasileña. Se argumentó que estaba contaminada. La versión desmentida oficialmente ayer decía que había “problemas fitosanitarios” con el envío argentino y que por eso estaba trabado su ingreso.
Ante la gravedad de la supuesta novedad, el propio embajador argentino en China se vio obligado a la desmentida. “No hay ningún problema. El embarque se está descargando normalmente”, indicó Juan Carlos Morelli. “Hasta ahora no hay ninguna detención ni demora en la carga”, añadió el funcionario. Sorprendido por las versiones publicadas en Buenos Aires, Morelli calificó de “excelente” la relación política y económica entre ambos países. “Las exportaciones argentinas han tenido un salto cualitativo y cuantitativo realmente inesperado”, concluyó el embajador.