ECONOMíA
› ZAFFARONI EXPLICA EL FALLO PESIFICADOR DE LA CORTE
“Perjudicar lo menos posible”
El ministro de la Corte Suprema de Justicia Eugenio Zaffaroni aseguró que el fallo conocido anteayer, que rechazó la demanda de un ahorrista que reclamaba la diferencia por la pesificación de sus depósitos a 1,40 más CER y la cotización actual del dólar, “de ninguna manera supone un precedente” para los restantes casos vinculados a la pesificación que esperan resolución. La sentencia motivó el mismo día un piquete en el Palacio de Tribunales por parte de los seguidores del cómico Nito Artaza. Ayer, el ministro del Interior, Aníbal Fernández, comparó al empresario teatral con el dirigente piquetero Luis D’Elía y reclamó la intervención de un juez. “Tomar el Palacio de Tribunales es tan grave como tomar una comisaría”, consideró. “No es cuestión de que porque uno es negrito, se lo sanciona, y otro, porque es actor, blanquito, no se lo sanciona.” Por su parte, Artaza sostuvo que “Fernández es un hombre de pobre capacidad intelectual y le pido a él como ministro del Interior que se dedique a combatir los problemas de inseguridad”, demandó. Por su parte, Zaffaroni se mostró sorprendido por el descontento de los ahorristas.
–¿El fallo emitido por la Corte sienta un precedente para los juicios pendientes por la pesificación?
–De ninguna manera puede decirse que sienta un precedente sobre otros fallos pendientes –consideró el integrante del máximo tribunal–, porque la situación de los que no aceptaron la pesificación y siguen con su reclamo es distinta. Eso continúa sin estar resuelto. El fallo firmado lo único que afirma es que si, por ejemplo, tengo un inquilino que no paga al que debo desalojar pero, en un momento dado, se me crea una situación de necesidad y en vez de afrontar un juicio de dos años, arreglo, después del arreglo no puedo volver a reclamar.
–¿Por qué cree, entonces, que los ahorristas protestan?
–El descontento no es explicable porque lo único dicho abarca a quien aceptó la pesificación. Más aún, se dejó abierta una puerta para que si en realidad había una situación de necesidad, pueda ventilarse en un juicio ordinario. Habrá una minoría de amparos llamados de segunda generación que pueden tener una situación de necesidad y queda abierta la puerta para plantearlo.
–¿Cómo podría en concreto implementar esto un ahorrista que aceptó retirar su dinero a 1,40 más CER?
–Si digo que estaba enfermo, que reclamé, que no me atendió nadie y era una urgencia de vida y que, si no tenía el dinero, me moría, queda abierta la posibilidad de un juicio ordinario para reclamarlo.
–¿Cuál es la visión de la Corte sobre las demás situaciones planteadas por la pesificación?
–Sobre las demás situaciones, en lo personal prefiero que lo sigamos discutiendo unos meses más, hasta que consigamos consenso y haya una solución definitiva y lo menos lesiva posible.
–¿Puede esperarse que la Corte emita distintos fallos sobre el mismo tema?
–Preferiría no abrir juicio sobre eso; hay diversas posibilidades que estamos contemplando, pero la intención es perjudicar lo menos posible, resolver la situación en serio y de una vez. Podríamos decir, por ejemplo, que el amparo no es la vía idónea, pero no me adhiero a eso en este momento porque es prolongar el conflicto y yo creo que esto hay que resolverlo por razones internas, internacionales, de imagen y de seguridad.
–¿En este camino habrá perdedores?
–Yo sé que la solución nunca va a satisfacer a todo el mundo, pero bueno, hay que dar una solución definitiva para no crear nuevas expectativas y evitar que esto se prolongue cinco años más.