El gobierno brasileño pidió a la Cancillería argentina que explique los motivos que llevaron a imponer un arancel del 21,5 por ciento a la importación de televisores provenientes de la zona franca de Manaos, informó el secretario de Comercio Exterior de ese país, Iván Ramalho. A la vez, el conflicto por los lavarropas podría zanjarse en una nueva ronda de negociaciones, tras lograrse acuerdos en los segmentos de cocinas y heladeras.
En tono conciliador, Ramalho explicó que con los televisores “se trata de una resolución por la que se abre un proceso de investigación sobre esos productos y por eso la Argentina adoptó provisoriamente el cobro de ese gravamen”. El funcionario, que estuvo la semana pasada en Buenos Aires para participar de las negociaciones entre los fabricantes de electrodomésticos de ambos países señaló que la información que le provea la Argentina servirá para “seguir de cerca las investigaciones” y verificar si hay algún daño a la industria argentina por la importación de televisores de Manaos.
La Argentina aplica a partir de ayer un gravamen del 21,5 por ciento a los televisores producidos en esa localidad amazónica, en el marco de una investigación antidumping abierta de acuerdo con los parámetros de la Organización Mundial de Comercio. Según datos de la Secretaría de Comercio de Brasil, las exportaciones brasileñas hacia la Argentina aumentaron un 75,2 por ciento en el primer semestre de este año, con relación al mismo período de 2003. La Asociación Nacional de Fabricantes de Productos Eléctricos y Electrónicos informó que pretende contestar los datos en los cuales se basó la Argentina para fijar el arancel a los televisores, porque considera que no hay una “invasión” del mercado de ese país. “Es necesario evaluar los datos reales del mercado argentino, pues, por las informaciones de que disponemos, no hubo una invasión imprevista de televisores brasileños sino una recuperación parcial de las ventas.”