ECONOMíA
› DIEZ MIL MILLONES DE SUPERAVIT EN COMERCIO EXTERIOR
Los precios soplan a favor
El intercambio comercial argentino sigue con viento a favor. Más por efecto de los precios que por aumento en las cantidades, las exportaciones siguen en ascenso. Pese al fuerte impulso de las compras externas de bienes intermedios y de capital, las importaciones vuelven a escalar, pero se mantienen en unos mil millones de dólares mensuales por debajo de las exportaciones. Las proyecciones para los últimos dos meses del año indican que las exportaciones superarán largamente los 32 mil millones de dólares, cifra que constituye un record histórico. Estos valores permitirían mantener el superávit del comercio exterior por encima de los 10 mil millones de dólares, aunque inferior al alcanzado en 2003.
El aumento del 12 por ciento en el precio promedio de los productos vendidos al exterior explica en gran medida el mayor valor obtenido por las exportaciones totales, que sumaron 28.448 millones de dólares en los primeros diez meses. Lo curioso es que un rubro de escaso valor agregado, “Residuos y desperdicios de la industria alimenticia”, haya sido el de mayor incremento en el valor absoluto exportado, precisamente por haber obtenido precios más elevados.
El otro gran aporte proviene de la industria automotriz, que por operaciones intrafirma (compraventa entre filiales de una misma marca) incrementó sus exportaciones a Brasil de vehículos, para obtener provecho de la reactivación en el país vecino. También salieron de fábricas locales una mayor cantidad de automóviles y camiones con destino a México. Otros negocios que movieron las cifras de exportaciones fueron las ventas de autopartes a España y Estados Unidos y de carnes refrigeradas y congeladas a Rusia, Venezuela, Alemania e Israel.
Por el lado de las importaciones, sobre un valor total de 18.027 millones ingresados, el rubro Bienes de Capital registra en los diez meses primeros de 2004 un espectacular crecimiento del 64 por ciento con respecto al año anterior. Sin embargo, los valores desagregados muestran que no es la inversión en equipamiento industrial lo que está motivando ese salto. Los productos de mayor significación en ese aumento resultaron los aparatos de telefonía celular y “aviones ingresados en forma temporaria por más de un año de plazo”. El tercer lugar, siempre dentro de lo que es considerado Bienes de Capital, le correspondió a las importaciones de acondicionadores de aire. En el cuarto lugar aparecen las máquinas para la industria aceitera y en el quinto, vehículos para transporte de mercancías. La amplitud de la calificación de Bienes de Capital impide observar si, efectivamente, el aumento en este rubro se corresponde con mayores inversiones en sectores productivos, ya que aparecen entremezclados varios renglones que, indudablemente, tienen mayor relación con el consumo suntuario.