ECONOMíA
› PREVEN QUE HABRA CORTES DE LUZ EN LA COSTA ATLANTICA
No se olvide de llevar velas
Desde la empresa distribuidora buscan restarle dramatismo. Los trabajadores denuncian una situación caótica y hoy paran. Se suceden las reuniones buscando no llegar a los cortes masivos.
› Por Raúl Dellatorre
Para el servicio eléctrico de la costa bonaerense se avecina un verano agitado. El personal de la distribuidora de la zona atlántica, EDEA, cumple hoy un paro de 24 horas demandando, entre otros puntos, incorporación de más trabajadores para poder prestar el servicio. Cammesa, la administradora del mercado mayorista, advirtió en su informe anual que la zona operará en temporada sin las reservas suficientes para afrontar cualquier contingencia. En Mar del Plata ya se registraron problemas de baja de tensión y cortes parciales a diario entre el 23 y 26 de este mes, mientras que la empresa distribuidora no descarta que sea necesario realizar cortes rotativos en el Municipio de la Costa en el período más crítico: la tercera y cuarta semana de enero.
En la Legislatura bonaerense se presentó un proyecto de ley pidiendo declarar “en emergencia eléctrica” a la provincia. Lo que motivó el pedido es el informe de Cammesa advirtiendo sobre los riesgos para el servicio eléctrico durante la temporada de verano en el eje turístico de la provincia, de San Clemente a Necochea. “La costa opera sin reservas”, informa Cammesa, repitiendo la señal de alarma que ya encendió un año atrás, aparentemente sin respuesta en los hechos. Operar sin reservas significa que no hay oferta disponible de suministro eléctrico para cubrir cualquier contingencia, como podría ser la salida de servicio de alguna usina o una línea de transmisión, o bien un aumento más allá de lo esperado en la demanda.
El sector sindical, con Luz y Fuerza Mar del Plata a la cabeza (encuadrado en la CTA y enfrentado con la FATLyF, “los gordos”), asegura que desde San Clemente a Villa Gesell (esta última atendida por una cooperativa local), todas las localidades costeras “están con cronogramas de cortes en enero”. En los últimos días, incluso durante el fin de semana de Navidad, se sucedieron las reuniones en Mar del Plata entre directivos de EDEA, representantes de Cammesa, de Obras y Servicios Públicos de la provincia y de la Secretaría de Energía para analizar el tema. El gobierno de Solá tiene a su cargo las centrales de generación de la Costa que hoy son parte del problema, por la falta de inversiones de los últimos años para ampliar su capacidad de generación. Las preocupaciones son compartidas pero las soluciones no abundan, en particular tratándose del muy corto plazo.
Según comentó un vocero de EDEA a Página/12, “no estamos viendo un cuadro tan complicado; acabamos de inaugurar una estación transformadora que aumenta la capacidad de distribución de Las Toninas a Mar del Tuyú; Mar del Plata no es problema, porque la oferta supera largamente la demanda. El inconveniente es que dependemos de las centrales de la Costa Atlántica, en manos de la provincia, para el suministro eléctrico de San Clemente a Villa Gesell; la demanda va a estar muy cerca de las posibilidades de abastecimiento, y no hay margen tal que permita estar tranquilos”.
El fondo fiduciario creado por la provincia para obras en el sistema eléctrico resultó insuficiente. “El plan de expansión del transporte está demorado; en su momento, la generadora de Costa Atlántica propuso incorporar otra máquina de 15 megavatios, que hubiese dado la reserva que hoy se necesita, pero no se hizo. Y para peor, estamos muy lejos del Sistema Interconectado Nacional, por lo que dependemos de nuestras propias centrales y de la línea de alimentación desde Olavarría, que llega con gran pérdida de tensión”, se quejan desde EDEA.
En LyF Mar del Plata, en cambio, recuerdan que esta situación la habían anticipado cuando se entrevistaron, no bien asumió este Gobierno, con Julio De Vido primero (en la CTA) y con el presidente Kirch-ner después. “Le entregamos una carpeta con el diagnóstico y los datos clave para hacer las inversiones necesarias; el Presidente se lo derivó a Oscar Parrilli (secretario general de la Presidencia), pero después no pasó nada”, recuerdan dirigentes del gremio. Se quejan de que la concesionaria contrate personas en forma precaria, no encuadradas en el convenio eléctrico, para hacer tareas técnicas en cables aéreos; que duplicó lacantidad de clientes por empleado en pocos años y que extendió en forma solapada los horarios de trabajo a través de las “guardias pasivas”. Hoy van al paro. Y si no hay respuesta, repetirán el 3 y el 7 de enero. Otro condimento de un verano muy caliente que se viene.