ECONOMíA
› FUERTE AUMENTO DE LOS ALQUILERES
Batalla desigual
El aumento de los alquileres, de hasta un 40 por ciento, llevó a que las asociaciones de inquilinos reclamen al Gobierno un “congelamiento” de esos valores. La respuesta de su contraparte, los propietarios, fue inmediata: “Es un disparate”, dijeron. El incremento de los alquileres fue una de las causas centrales del alza de la inflación en mayo, que llegó al 0,6 por ciento.
“Pedimos, queremos un congelamiento de los alquileres, pero no sabemos en qué medida el Gobierno puede respondernos”, admitió Noemí Caracciolo, presidenta de la Asociación de Inquilinos de la República Argentina (AIRA). En tanto, la Cámara de Propietarios (Capra), a través de su vicepresidente, Enrique Abbati, descartó esa posibilidad, al calificarla de “disparate, porque volverá como un boomerang contra los propios inquilinos, porque cuando se habla de eso, los propietarios retraen la oferta y sacan las propiedades del mercado, lo que agrava la crisis”.
Respecto de los barrios en los que más se sintió la suba de alquileres, tanto Abbati como Caracciolo coincidieron en que se dio en barrios como Palermo, Recoleta, Belgrano, Puerto Madero y Núñez. “En la Capital Federal los precios han aumentado en forma muy despareja: en Recoleta, Puerto Madero y en el Barrio River, en Núñez, los alquileres aumentaron en forma significativa, del 20 por ciento al 30 por ciento”, dijo Abbati, pero “en barrios como Almagro, San Cristóbal, Montserrat, Flores, los aumentos fueron de menos del 10 por ciento”, añadió.
En cambio, Caracciolo afirmó que “los alquileres, en algunos casos, aumentaron en un 100 por ciento, gente que pagaba 300 o 400 pesos, ahora paga 700 u 800 por un dos ambientes”, describió, en referencia a los contratos que deben ser renovados, en tanto que para los acuerdos vigentes, cuyos precios se incrementan de manera escalonada, los aumentos rondan el “50 por ciento”.
“Los aumentos son alarmantes”, coincidió Radamés Marini, titular de la Unión Argentina de Inquilinos, para quien “los propietarios tienen una expectativa inflacionaria, por lo que “se impone la necesidad de que el Gobierno asuma una actitud de contención del problema a fin de hacer cesar una situación angustiante”.
Para Abbati, la suba de precios encuentra dos razones: una, que desde la crisis de 2001 “no se ha construido tanto”, y la segunda, que “no existe la indexación, lo que sube artificialmente el precio de los alquileres en los contratos”.