En la recta final quedaron sólo tres interesados por el Banco de Entre Ríos (Bersa): el Nuevo Banco de Santa Fe, el Comafi y el Banco de Santiago del Estero. Esos grupos presentaron ayer sus respectivas ofertas económicas. El ganador se conocerá el próximo miércoles, luego del período de evaluación que estará a cargo del Banco Nación. Una vez que termine este proceso, al sistema financiero le quedará un solo carozo sin digerir de la crisis, el Banco Bisel. El Bersa, el Bisel y el Suquía estuvieron en manos del grupo francés Credit Agricole hasta que estalló la crisis de 2001. Los franceses huyeron y el Banco Nación se hizo cargo de las entidades financieras. Hace algunos meses se resolvió la situación del Suquía, que pasó a manos del Macro-Bansud. Ahora, el Santa Fe, en poder del banquero Eduardo Ezkenazi, hizo la mejor oferta, por un total de 172 millones de pesos. El atractivo de los bancos provinciales son las comisiones que cobran por ser agentes financieros de los distritos y por tener como clientes a los empleados públicos. El Entre Ríos cuenta con 74 sucursales y ya recibió un aporte de 195 millones de pesos de Sedesa.