Lejos de solucionarse, la deuda sigue siendo una carga pesada aun cuando ya terminó la reestructuración de la deuda. Al 31 de marzo pasado alcanzaba a 126.567 millones de dólares. Representa el 73 por ciento del Producto Bruto. Significa que, ahora, cada argentino adeuda 3420 dólares. Está por debajo de los 3984 dólares del año 2001, justo antes de la explosión de la crisis.
Las cifras oficiales divulgadas ayer fueron remitidas al Congreso, tal cual lo obliga la ley 26.017, que fue la que trabó la posibilidad de reabrir el canje y le dio al Congreso una mayor participación en el tema de la deuda. El informe fue encabezado con el título “Datos deuda post reestructuración”. Junto con esta información, el Palacio de Hacienda comunicó que ya se liquidaron todos los bonos del canje y se levantaron los viejos papeles que habían quedado en default.
El monto de la deuda difundido ahora resultó levemente superior al que el propio Ministerio de Economía divulgó no bien finalizó el canje. En vez de 126.567 millones de dólares se había anunciado un pasivo de 125.283 millones. La diferencia de 1284 millones de dólares se debe a la capitalización acumulada por los títulos públicos surgidos del canje durante el primer trimestre del año.
Más allá de las variaciones absolutas que sufrió la deuda en los últimos años, se nota una mejora en la relación del stock con las principales variables de la economía. Por ejemplo, en 2001, los pagos de los intereses representaban el 38 por ciento de las exportaciones. Ahora alcanzan apenas al 9 por ciento. No sólo porque bajaron los servicios de la deuda sino también porque aumentaron las ventas al exterior. Respecto de las reservas, los intereses cayeron del 70 al 16 por ciento. Otros dos datos claves también mejoraron desde la crisis. Uno refiere a la relación de la deuda con el PIB: cayó del 113 al 73 por ciento. El otro compara los vencimientos de los próximos cinco años. Mientras en 2001, 9 de cada 10 dólares adeudados vencían a cinco años vista, ahora cayó a 5,3 de cada 10.
La deuda se alivió, en dólares, para cada argentino. Hace cuatro años, cada uno de los 36,2 millones de argentinos debía 3984 dólares. Ahora, cada uno de los aproximadamente 37 millones adeuda 564 dólares menos.
Si se sigue la evolución de lo que pasó en este lapso se destacan dos períodos bien diferenciados.
u Uno ocurrió inmediatamente después de la devaluación y el default. Se emitieron 41.213 millones de dólares de deuda que se repartieron entre distintos sectores: entre los bancos por la pesificación asimétrica, entre los ahorristas que recibieron títulos para salir del corralito y el apoyo que recibieron las provincias.
u El otro período fue contrario. Hubo una disminución de la deuda, de 67.305 millones de dólares, gracias a la reestructuración de la deuda. El stock también bajó por los pagos netos de capital que se giraron a los organismos: fueron 6697 millones de dólares. A pesar de ello, la deuda con los organismos todavía asciende a 29.000 millones de dólares.