ECONOMíA
› LAVAGNA ANUNCIO INCENTIVOS PARA
LA PRODUCCION DE AUTOPARTES
Ponen primera para ganarle a Brasil
Las terminales que compren componentes nacionales recibirán reintegros. Suben la producción y las ventas en junio.
El Gobierno puso una zanahoria delante de las automotrices para tentarlas a invertir en el país. En un acto en Casa Rosada, Roberto Lavagna anunció ayer un régimen de incentivos que abarata entre un 8 y un 6 por ciento las autopartes compradas a productores locales. El beneficio, que se extenderá por un lapso de tres años, es para las terminales que decidan ensamblar nuevos modelos en Argentina. Con ello se busca equiparar, aunque sea parcialmente, los subsidios que otorga Brasil para la radicación de esas mismas inversiones. El segundo objetivo de la medida es aumentar la participación de piezas nacionales en la fabricación de vehículos. El anuncio coincidió con la difusión de la performance de la industria en junio, con un aumento interanual del 18,2 por ciento en producción y del 26,1 en ventas.
“Queremos impulsar una sustitución eficiente y competitiva que permita generar empleo”, remarcó Lavagna, al presentar el programa ante unos 50 altos ejecutivos del complejo automotor. Las terminales recibirán un reintegro del 8 por ciento por la compra de componentes nacionales durante el primer año de producción de un nuevo modelo, beneficio que bajará al 7 por ciento el segundo año y al 6 por ciento el tercero. La inversión debe ser como mínimo de 30 millones de dólares en el caso de automóviles y de 15 millones en el de camiones. La autoparte se considera nacional cuando tiene como mínimo un 70 por ciento de contenido local. El estímulo se extiende a los productores de motores, cajas de cambio y ejes con diferencial.
“Este es un buen ejemplo para el desarrollo del país: un modelo de cooperación entre el Gobierno, los empresarios y los trabajadores”, destacó el presidente de la filial local de Volkswagen, Viktor Klima, para quien se trata de “una señal política de que se presta atención al sector productivo”. Desde las primeras filas del salón asentían el presidente de la Asociación de Fábricas de Autocomponentes (AFAC), Rodolfo Achille; su par de la Asociación de Concesionarias (Acara), Abel Bomrad; el director institucional del Grupo Techint, Luis Betnaza; los jefes de Fiat, Cristiano Rattazzi; de Renault, Juan Manuel Lardizabal, y el secretario general de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), Antonio Caló.
Volkswagen y Peugeot-Citroën son las únicas terminales que tienen en carpeta la fabricación de nuevos modelos en el país, a partir del próximo año. Ellas serán las primeras favorecidas con la medida. La aspiración de Lavagna y del secretario de Industria, Miguel Peirano, es que el incentivo atraiga otras inversiones. Es un intento por equiparar las ventajas que ofrece Brasil para la instalación de plataformas de montaje en su país. Otra acción en la misma dirección fue establecer la devolución de las deudas del Plan Canje a las automotrices que comprometan inversiones.
El dueño de la fábrica de válvulas BBB, José Luis Basso, indicó que “esto es una señal para que se invierta más y se expanda la capacidad productiva”, en muchos casos ocupada hoy al ciento por ciento. “En Brasil uno va a poner una fábrica y no le cobran impuestos, contribuciones ni nada. Argentina no da incentivos, pero eso está cambiando gracias al trabajo conjunto de toda la cadena de valor”, celebró el empresario.
El sector autopartista sufrió en la segunda mitad de los noventa una sangría de empresas que trasladaron sus fábricas a Brasil, e incluso hubo repuestos tan básicos como las bujías que dejaron de producirse en el país y que hoy se importan en su totalidad.
El sector automotor vive una etapa de fuerte recuperación. En junio las terminales fabricaron 26.573 autos, 18,2 por ciento más que en el mismo mes de 2004 y similar cantidad que en mayo pasado, cuando salieron de las fábricas 26.675 unidades. Las ventas en el mercado interno se expandieron 26,1 por ciento (34.922 vehículos) respecto a junio de 2004, y 3,6 por ciento en relación a mayo. Las exportaciones, en tanto, llegaron a 13.177 vehículos, 53,8 por ciento más en la comparación interanual y 6,8 por ciento más que en mayo. Los tres principales destinos para las exportaciones siguen siendo Brasil (36,4 por ciento), México (33,1) y Chile (15,2). Las ventas totales para el año se proyectan en 380.000 unidades, mientras que el objetivo de las automotrices para 2006 es alcanzar medio millón.