Mientras el grupo Suez anunció la cancelación de la venta de las acciones de Aguas de Santa Fe y se propuso transferir el servicio al Estado provincial, el gobierno de Jorge Obeid afirmó que la empresa no puede abandonar la prestación del servicio sin antes solicitar la rescisión del contrato. La compañía, en cambio, da por caída la concesión por culpa de las autoridades provinciales luego de que resolvieron ejecutar las garantías por 68 millones de pesos. A través de un comunicado, Suez indicó que tal decisión hace imposible la operación proyectada de compra-venta de parte del paquete accionario de la empresa, que estaba por ser transferido a la empresa Fides Environment. “Suez no puede abandonar la obligación del servicio, en todo caso puede pedir la rescisión del contrato y nosotros decidiremos qué sanciones se le aplican”, respondió el ministro de Obras Pública, Alberto Hammerly.