ECONOMíA
Moyano contra Lavagna
Cuando los rumores sobre un eventual alejamiento de Roberto Lavagna parecían perder espacio en la agenda, el camionero Hugo Moyano se ocupó del tema. “Nadie es imprescindible en los cargos”, contestó ayer sobre la continuidad del ministro de Economía, con quien se pelea cada vez que tiene oportunidad. “La decisión es del presidente Kirchner”, agregó. Las declaraciones de Moyano no pasaron desapercibidas en la escena política. Hace unas semanas había dicho que Lavagna no sabía cómo controlar la inflación. Pocos días después, en varias notas periodísticas se consignó que el ministro atribuía esas palabras de Moyano a las diferencias que mantiene con el ministro de Planificación, Julio De Vido. Lavagna quiere recortar el gasto en obra pública, que depende de la cartera de De Vido, porque cree que impacta sobre la escalada inflacionaria. El ministro de Economía también opina que los aumentos salariales presionan sobre la inflación, como aseguró el viernes en la clausura del coloquio de IDEA. Como jefe de la CGT, Moyano salió a contestarle en duros términos: “Ese es un caballito de batalla que ya no tiene asidero porque quedó demostrado que los que generan inflación no son los salarios, sino los que remarcan los precios en las góndolas. Los señores supermercadistas que alientan la suba de la inflación deben tener memoria de los episodios que ocurrieron hace apenas tres años”, advirtió Moyano. Se refería a los saqueos de finales del 2001.