Por Claudio Loser.
“Ya pasó en otra época”

“El Fondo es noticia cuando presta plata y para ello pone condiciones. Desde que la Argentina canceló su deuda y el FMI no puede imponer sus soluciones empieza a ser menos relevante. Lo mismo pasó en Chile, en México y en Brasil. El Fondo tiene 180 países miembro, de los cuales 130 no tienen programas activos. Supongo que los diarios le darán mayor importancia a esta misión que está ahora en Buenos Aires cuando el directorio publique el informe con el resultado de la auditoría. Imagino que dirá que hay problemas con la inflación, con la energía, con la política de control de precios, con la intervención general del Gobierno en la economía y con las relaciones entre el sector público y el sector privado. Yo ingresé al organismo en 1972 y varias veces escuché que perdía relevancia, como a principios de los ’70 y de los ’90, y después la recuperó.”

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Por Héctor Valle.
“Terminó una restricción”

“En 2004 uno de los augurios más negativos era por los pagos que había que hacerle al Fondo en 2005 y 2006. La cancelación anticipada terminó con toda esa agenda de discusión. A partir de haber eliminado la restricción del Fondo el Gobierno pudo anotar algunos éxitos importantes: la política de precios que permitió controlar la inflación, el sostenimiento de un tipo de cambio competitivo y el superávit externo. Es muy importante marcar que esta política permitió generar una tasa de ahorro interno que es superior a la tasa de inversión. Es una ventaja destacable porque no necesitamos del apoyo financiero del FMI para resolver la cuestión del endeudamiento. Además, la situación se hace más controlable en momentos de turbulencia financiera internacional como el actual. Me resulta llamativo que el gobierno de Estados Unidos esté siguiendo la línea del Fondo en la suba de las tasas de interés.”

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Por Eduardo Curia.
“No pueden criticar”

“El último miércoles estuve almorzando con Ranjit Teja, jefe de la delegación que vino a Buenos Aires. Fue todo muy light, muy académico, de cortesía. No había lugar para ningún tipo de fricción. Sólo quiso conocer mi opinión del proceso económico, sin formular comentarios ni hacer apreciaciones. Como la Argentina no tiene un programa con el FMI, no hay condicionalidades. Hace tiempo que el FMI atraviesa por una etapa de desprestigio. No sólo acá, sino a nivel mundial. Para el Gobierno es importante haber logrado sortear las recomendaciones del organismo aun en momentos difíciles de la crisis. Se ganaron márgenes de maniobra de política económica muy significativos. Espero que el país no atraviese por situaciones que hagan necesario un acuerdo con el Fondo por mucho tiempo. En este momento pensar en esa posibilidad es ciencia ficción, porque la economía está muy sólida.”