La actividad industrial creció durante mayo un 7,3 por ciento en relación con igual mes del año pasado, y 0,9 por ciento en términos desestacionalizados en comparación a abril. Así, según los datos publicados por el Indec, durante los primeros cinco meses del año, la producción industrial acumula una expansión del 7,1 por ciento. La elaboración de materiales para la construcción y la fabricación de automóviles lideran la expansión.

“El sector manufacturero está creciendo significativamente, demostrando que ante políticas económicas consistentes el sector tiene un enorme potencial de desarrollo”, aseguraban ayer desde la Secretaría de Industria, que conduce Miguel Peirano. “El fortalecimiento del mercado interno, un tipo de cambio competitivo y políticas activas crean condiciones para avanzar en la reindustrialización del país”, explicaron.

La producción de materiales para la construcción lideró en mayo el crecimiento, con un 19,8 por ciento; seguido el sector automotor, con una suba del 19 por ciento; mientras que la elaboración de cigarrillos aumentó el 15,5 por ciento.

Sólo algunos subrubros registraron mermas interanuales, debido a factores coyunturales. La producción de carne vacuna retrocedió un 19,4 por ciento respecto de mayo del año pasado, aluminio cayó 5 por ciento, neumáticos bajó 3,7 por ciento y productos químicos básicos el 2,1 por ciento.

En el Palacio de Hacienda consideran que este año, al igual que en el 2005, “habrá una consolidación del crecimiento industrial con fuerte impacto sobre el empleo”. En este sentido, los funcionarios de Miceli destacan que el crecimiento “se da en todas las ramas industriales y tanto en las pymes como en las grandes empresas”.

La encuesta cualitativa que realiza el Indec entre empresarios muestra que las expectativas para los próximos meses son de moderado optimismo.

El 65,8 por ciento de los empresarios consultados no espera modificaciones en la demanda interna, mientras que el 23,7 anticipa una suba y el 10,5 por ciento prevé una baja. Por el lado de las exportaciones, el 55,6 por ciento estima que se mantendrán en los niveles actuales, mientras que un 36,1 anticipa una mejora y el 8,3 por ciento cree que disminuirán. Vale aclarar que en abril, el porcentaje que preveía una caída era del 17,9 por ciento. En el caso de las ventas al Mercosur el panorama es aún más cauto, ya que el 66,7 por ciento no espera cambios en la tendencia. El 25 por ciento anticipa una suba y sólo el 8,3 prevé una baja. A pesar de los actuales niveles de crecimiento, la utilización de la capacidad industrial registró una baja (actualmente se ubica en el 70,4 por ciento). Según fuentes de Economía, este dato marcaría que existen nuevas inversiones en la industria, las cuales elevan la capacidad ociosa del sector. Por el contrario, hay quienes sostienen que algunos sectores industriales ya llegaron al límite de su capacidad de producción, y que encontrarían un cuello de botella para seguir adelante a menos que realizaran nuevas inversiones. Como sea, durante el primer trimestre del año, la inversión creció 23 por ciento.