Más allá de discrepar con algunas políticas del Gobierno como los acuerdos de precios o la postergación de aumentos de tarifas para los usuarios residenciales, la mayoría de los economistas y empresarios que participaron ayer de la reunión del Consejo de las Américas coincidió en destacar la solidez económica y las buenas perspectivas para seguir con el crecimiento. Es el mismo grupo de consultores y ejecutivos que en la década pasada defendió las políticas del menemismo. Ahora le reconocen a Kirchner el superávit fiscal, aunque siempre están advirtiendo por la evolución del gasto público.

Gustavo Cañonero, economista jefe para América latina del Deutsche Bank, aseguró que en la próxima década habrá una tendencia favorable para países productores de bienes primarios, como la Argentina, a partir de la explosión de la demanda de potencias como China e India. En su descripción de un escenario favorable para el país, incluyó la veloz expansión de la inversión en el sector de la construcción. Su única advertencia, repetida por varios de los expositores, fue por la situación energética. Estimó que la Argentina necesita inversiones en el sector de por lo menos cinco mil millones de dólares al año durante los próximos cuatro.

El presidente de Chevron Latin America, Ali Moshiri, coincidió en que la Argentina debe “afrontar la cuestión energética”. Luego anunció que su empresa invertirá 300 millones de dólares en 2007. A su turno, Marcelo Midlin, presidente del grupo Dolphin, que engloba a Edenor, Transener y Piedra del Aguila, dijo que el desafío para las empresas del sector es responder al “enorme crecimiento económico de los últimos tres años, que generó una fuerte demanda eléctrica”. “Si el PBI se consolida a un crecimiento de 3,5 por ciento, se deberán invertir cerca de 10 mil millones de dólares para incrementar la capacidad instalada”.

En representación del sector bancario, uno de los expositores fue Juan Bruchou, presidente de Citibank, quien sostuvo que el sistema financiero está “sólido, robusto y bien capitalizado”. Destacó que el crédito en general creció 40 por ciento en los dos últimos años. Pero advirtió que la cartera bancaria es de corto plazo y que la limitación del sistema está en la financiación a largo plazo. “En el mercado local no hay disponibilidad de recursos para prestar a largo plazo. Tiene que desarrollarse el mercado de capitales”, remarcó.

En el panel de oportunidades de inversión, el vicepresidente de Microsoft, Eugenio Beaufrand, señaló las exportaciones de software crecieron 600 por ciento y que para 2007 venderá por 250 millones, superando a Brasil como primer exportador de Latinoamérica.