El peso volvió a apreciarse frente al dólar y se comercializó en el mercado libre a 3,50/3,60 pesos por unidad. Para absorber liquidez el Banco Central tomó pesos en colocaciones de corto plazo a una tasa récord de casi 130 por ciento anual. La Bolsa de Comercio, en tanto, ganó 5,1 por ciento y los bonos aumentaron 3,3 por ciento. El riesgo país continuó por encima de los siete mil puntos básicos.
El Banco Central se mostró activo en su intervención. Vendió 55,5 millones en el segmento mayorista y 7 millones entre las entidades que operan por su cuenta y orden. También compró 65,6 millones. De acuerdo a las cifras preliminares el saldo habría sido positivo para la autoridad monetaria en alrededor de tres millones.
“La demanda minorista está paralizada. Muchas de las personas que compraron a 4 ahora tienen que salir a vender para vivir”, graficó un cambista. Hace una semana que la cotización de la moneda estadounidense viene en baja, a raíz de la convocatoria a elecciones anticipadas por parte de Eduardo Duhalde y a la postergación de vencimientos que decidió el FMI tras su encuentro con Lavagna.
Por su parte, los bancos y casas cambiarias que negocian según las normas del BC cotizaron a 3,43/3,51 por unidad, con una baja de 3 centavos en la punta vendedora respecto del cierre del viernes.
Pero bajar la cotización del dólar tuvo otro costo pata el Central. Con el objeto de absorber liquidez afrontó ayer un costo récord en la licitación de letras en pesos (Lebac), al fijar una tasa anual del 129,65 por ciento para una colocación a 14 días. El monto aceptado en la licitación fue de 247,9 millones de pesos, 77,9 millones más que el volumen original ofertado.
En el mismo llamado, la autoridad monetaria licitó letras en dólares a una tasa sustancialmente menor a la de la colocación en pesos: 1,029 por ciento anual, para un monto de 57,271 millones, a un tipo de cambio de 3,5317 pesos por dólar. El Gobierno fijó en el programa monetario la absorción de liquidez mediante colocación de LEBAC por 2900 millones de pesos.