La desgastante negociación con el FMI ingresará en once días en una nueva etapa. El organismo de crédito informó ayer a través de un comunicado los nombres de quienes conformarán el “comité de expertos” encargado de arbitrar, entre el Gobierno y el Fondo, en el conflicto por el programa monetario y la reestructuración del sistema financiero. Las conclusiones de ese cuerpo serán determinantes para la definición de ambos temas, y la conformación del equipo anticipa que las opiniones se inclinarán hacia lo que reclama el establishment financiero. Lavagna corre el riesgo de tener que someterse a propuestas que hasta el momento rechaza con vehemencia, como la entrega forzosa de bonos a los ahorristas con depósitos reprogramados o la fusión de la banca pública. Su otra opción, si esas fueran las medidas sugeridas, sería renunciar.
En su comunicado, el director gerente del FMI, Horst Koehler, expresó su “satisfacción” por cómo quedó integrado el comité y anticipó que su tarea será la de “definir un ancla monetaria para controlar la inflación y otros aspectos institucionales, incluida la independencia del Banco Central. Estos son elementos fundamentales de un programa fuerte y amplio de estabilización para la Argentina”. Los expertos “asesorarán al gobierno argentino y a nosotros mismos sobre temas cruciales para diseñar un marco monetario”, agregó. Para no decir directamente que no a un acuerdo con Argentina, Koehler y su segunda, Anne Krueger, abrieron la negociación al comité de especialistas de fuerte reputación internacional, para dar mayor solidez a sus argumentos, hoy cuestionados desde diversos ángulos. Los cuatro hombres elegidos son los siguientes:
- Hans Tietmeyer: Hasta hace dos años presidente del Bundesbank (banco central alemán), cargo desde el que competía en influencia internacional con su par de Estados Unidos, Alan Greenspan. Es una personalidad de renombre en el ámbito de las finanzas. Tiene fama de ser extremadamente duro en política monetaria y hace hincapié en el control de la inflación. Participó de la comisión de banqueros centrales que preparó los documentos monetarios del Tratado de Maastricht, el cual estableció a los países europeos las estrictas condiciones para formar parte de la Unión Europea. Está próximo a cumplir 71 años. Seguramente presidirá el comité.
- Luis Angel Rojo: De su larga carrera, el máximo cargo que ostentó fue el de presidente de la banca central española. Es la voz de los bancos de ese país en el comité. El BBVA Francés y el Río forman parte del grupo de entidades extranjeras que presiona a Lavagna por un plan bonos compulsivo. Rojo, de 68 años, ganó el Premio de Economía Rey Juan Carlos en 1986.
- Andrew Crockett: Es el gerente general del Banco Internacional de Pagos de Basilea, una suerte de banco central de los países del Grupo de los 7. También es presidente, desde 1994, del Foro de Estabilidad Financiera. Anteriormente fue funcionario del FMI entre 1972 y 1989 y director ejecutivo del Banco de Inglaterra de 1989 a 1993. En este último período fue miembro del Comité Monetario de la Unión Europea. “Estaba horrorizado con las cosas que se hicieron en Argentina en el último tiempo, especialmente con la pesificación”, comentó a Página/12 un ex funcionario del Ministerio de Economía.
- John Crow: Trabajó por más de una década en el FMI, durante los años ‘60 y ‘70. Luego fue presidente del Banco (central) de Canadá, hasta febrero de 1994. Su biografía dice que nació en Londres y que en su juventud estuvo dos años en la Real Fuerza Aérea británica. “Está influenciado por los ejecutivos del Scotiabank, que se fueron de la Argentina porque dicen que acá no se puede hacer negocios”, explicó el informante.
Todo el grupo parece mucho más cercano a las posiciones de la banca extranjera y del FMI que a las de Lavagna. El comité estará en Buenos Aires entre el 22 y el 24 del corriente mes, y allí podría empezar a develarse la incógnita de si habrá o no acuerdo con el FMI.