El gremio ferroviario anunció un paro para el jueves, como una forma de meter presión en la discusión salarial. En tanto que hoy el Ministerio de Trabajo intentará reencauzar ese conflicto y la paritaria de los metalúrgicos, que el Gobierno pretendía cerrar como testigo con un aumento del 15 por ciento, aunque todavía no logra acercar posiciones entre la UOM y los empresarios.

En un escueto comunicado, la Unión Ferroviaria anunció ayer que dispuso un paro de actividades por 24 horas y fundamentó la medida de fuerza “en respuesta a la extrema demora en que incurren las empresas a cargo del transporte ferroviario metropolitano en discutir la revisión de las condiciones de los convenios colectivos de trabajo”.

Hasta ahora, el único gremio importante que cerró la negociación salarial en paritarias fue el de bancarios, que acordó un 14 por ciento de aumento, anuncio que fue realizado en la Casa Rosada por el propio ministro de Trabajo, Carlos Tomada.

Sin embargo, las discusiones más importantes están todavía abiertas. “Los reclamos (salariales) parecen no estar dentro de ese pedido de mesura y empieza a preocupar el inicio de conflictos que ponen en peligro grandes actividades”, afirmó Daniel Funes de Rioja, asesor de la Unión Industrial Argentina (UIA). Esa clase de declaraciones desde el sector patronal encuentra aval en el techo del 15 por ciento que, extraoficialmente, el Gobierno fijó para este año a los salarios.

Hoy por la tarde, en Trabajo habrá una nueva ronda de negociación entre la Unión Obrera Metalúrgica y los cámaras empresarias. La UOM, liderada por Antonio Caló, insiste con una suba del 20 por ciento, mientras que los empresarios están plantados en la pauta oficial.