Ni siquiera la compra de 137 millones de dólares por parte del Banco Central logró sostener el tipo de cambio. El dólar cerró ayer a 3,10 pesos para la venta en las casas de cambio, mientras que en el segmento mayorista terminó en 3,083 con una baja de una milésima de peso. Tras esta intervención, las reservas ya se encuentran en 38.237 millones de dólares. La lluvia de divisas se debe a la enorme liquidación de los exportadores de cereales, en medio de la cosecha gruesa. Por su parte, las acciones terminaron la jornada con una caída del 0,5 por ciento y un volumen moderado de negocios, de 65 millones de pesos. Los títulos públicos registraron leves retrocesos. El cupón del PIB en pesos descendió el 1,0 por ciento.