Catamarca, con una tasa del 14,2 por ciento, es la ciudad con mayor desocupación del país, seguida por los partidos del conurbano bonaerense con 11,9 por ciento y la ciudad de Tucumán, con 11,8 por ciento. Por el contrario, Río Gallegos, junto con San Luis, son los conglomerados urbanos con menor desocupación, con el 1,7 por ciento y el 1,9 por ciento, respectivamente. En seis grandes aglomerados urbanos la desocupación se ubica todavía en dos dígitos.

El Indec difundió ayer los datos completos de la Encuesta Permanente de Hogares correspondiente al primer trimestre de 2007. Como informó Página/12, el desempleo para el total de aglomerados urbanos fue de 9,8 por ciento, por encima del 8,7 por ciento del cuarto trimestre de 2006, pero inferior al 11,4 por ciento del primer trimestre del año pasado. Siempre considerando como ocupados a los beneficiarios de planes Jefes de Hogar que prestan alguna contraprestación laboral. Si se los considerara como desocupados, el índice en el primer trimestre estaría todavía en el 11,1 por ciento.

Según el Indec, la baja de la desocupación en el último año fue mayor en las ciudades de más de 500 mil habitantes que en las ciudades de menor tamaño, lo cual es lógico porque en estas últimas el desempleo es casi 3 puntos inferior.

Del análisis regional surge que, durante el primer trimestre, las menores cifras de desempleo se registraron en Cuyo (4,8 por ciento), el Noreste (5,5 por ciento) y la Patagonia (6,1 por ciento). Notablemente, regiones como el Noreste, niveles muy bajos de desocupación conviven hoy con los mayores índices de pobreza del país (superiores al 55 por ciento de la población). Tal paradoja se explica por los míseros salarios que se pagan en la zona –fundamentalmente en actividades rurales, temporarias y de gran estacionalidad–, lo cual generaliza la condición de los trabajadores pobres. En cambio, la desocupación en el Noroeste fue del 10,4 por ciento y en la región Pampeana del 9,2 por ciento.

Seis aglomerados urbanos aún padecen tasas de desempleo de dos dígitos. Además de los partidos del Gran Buenos Aires, Catamarca y Tucumán, se encuentran en esta situación Salta (10,5 por ciento), Rosario (10,4 por ciento) y San Nicolás y Villa Constitución (10 por ciento).

Por el contrario, entre las ciudades con menores índices de desempleo, además de Río Gallegos y San Luis, se destacan Rawson (5,7 por ciento), Posadas (4 por ciento), Comodoro Rivadavia (4,1 por ciento) y Formosa (3,6 por ciento). Aunque la única “ciudad grande” incluida en ese selecto club es Mendoza, con un desempleo de sólo 4,8 por ciento.

Entre los centros urbanos con niveles de desocupación todavía elevados, pero de un dígito, se encuentran Córdoba (9,7 por ciento), Mar del Plata (9,4 por ciento), Viedma-Carmen de Patagones (8,9 por ciento), Ushuaia-Río Grande, Bahía Blanca y la ciudad de Buenos Aires, con un 8,7 por ciento.

En Santa Fe, en tanto, la desocupación el primer trimestre fue de 8,5 por ciento, y en La Plata, del 8,1 por ciento.

Con los últimos datos del Indec, en el Ministerio de Economía afirman que “a los 17 trimestres de crecimiento de la economía (desde el 2003 en adelante) le correspondieron 16 trimestres de reducción de la desocupación. Para elaborar los indicadores del mercado laboral, el Indec releva los principales 31 aglomerados urbanos, con una población de 24 millones de personas. Si esas cifras se trasladaran a una población total de 38 millones de habitantes, entonces aún habría 1,7 millón de desocupados en el país. Si a esa cifra se le agregan los subocupados (aquellos que trabajan menos de 35 horas semanales y desean trabajar más), otro 1,6 millón de personas, se tiene que todavía unos 3,3 millones de argentinos afrontan serios problemas de inserción laboral.