Con una recaudación de 400 millones de pesos en Ingresos Brutos, ABL y Patentes, finalizó ayer el plan de regularización de deudas que había lanzado hace dos meses el gobierno de la ciudad de Buenos Aires. La morosidad estimada era de aproximadamente 680 millones. La recaudación superó la previsión original del gobierno, de recuperar ingresos por 250 millones. El Ejecutivo había extendido el plazo del programa por los numerosos pedidos de organizaciones vecinales, consejos de profesionales y otras entidades. El plan contemplaba la quita del 100 por ciento de los intereses de los diferentes impuestos y pagos de hasta 60 cuotas para aquellos contribuyentes que se presentaran espontáneamente a cancelar sus obligaciones. Mientras que en casos en los cuales la Dirección de Rentas de la ciudad ya hubiera notificado al moroso de la deuda o incluso si ya hubiera iniciado el trámite judicial para cobrarla, la reducción de los intereses fue del 50 por ciento. Para poder acceder al plan era necesario que las deudas fueran anteriores al 1º de enero de 2007 y que en forma previa se hubiera abonado el 15 por ciento del monto total. La medida se tomó frente a las urgencias fiscales de la ciudad.