La presión de Roberto Lavagna para permitir el ingreso del capital privado a la banca pública mereció una primera reacción. Ayer se realizó un acto frente a la sede del Banco Provincia en La Plata para repudiar la iniciativa. Concurrieron representantes de las empresas que conforman el Grupo Bapro, sindicalistas, estudiantes y legisladores. El acto fue convocado por el Movimiento en Defensa del Banco Provincia, y durante su transcurso se reclamó al gobierno provincial que impulse una enmienda constitucional que impida la privatización o la incorporación de capitales privados a la entidad financiera bonaerense. Los organizadores le enviaron una nota al gobernador Felipe Solá “para consensuar acciones concretas en pos de defender a la entidad de cualquier intento de privatización que vulnere la soberanía provincial”. Además, se inició una campaña para rechazar el proyecto de Lavagna.