ECONOMíA
› HOY DEFENDERA EN BASILEA EL CASO ARGENTINO
Pignanelli con libreto escrito
› Por Maximiliano Montenegro
Hoy el presidente del Banco Central, Aldo Pignanelli, rendirá examen en Basilea, donde expondrá en una reunión de banqueros centrales especialmente convocada para tratar el “caso argentino”. Aunque parezca sorprendente, el discurso de Pignanelli fue elaborado conjuntamente con el ministro Lavagna, con quien hasta hace poco estuvo duramente enfrentado. Actualmente, sin embargo, son “aliados” en la estrategia de evitar que, sin acuerdo con el Fondo, el dólar estalle.
La presentación de Pignanelli se divide en dos partes. La primera, describe la situación entre enero y mayo, narrando y explicando cada una de los hechos ocurridos durante ese período: devaluación, pesificación asimétrica, liberación cambiaria, disparada del dólar, etc.
La segunda parte se concentró en el período de mayo en adelante; es decir, desde la asunción de Lavagna al frente de Economía y la posterior designación de Pignanelli como presidente del Central. Como suele decir el ministro, “todo hacía pensar que se venía hiperinflación, incluso los propios informes del FMI y el Banco Mundial lo advertían. Pero no fue así”, comentará Pignanelli. Y destacará que, desde entonces, “hubo un viraje en el humor financiero: el tipo de cambio se mantiene estable hace ya tres meses, los depósitos bancarios están aumentando, al igual que las reservas, y se desaceleró fuertemente la fuga de depósitos vía amparos”, explicará el funcionario.
Con la colaboración del equipo de Lavagna, el titular del Central también preparó algunas respuestas para eventuales preguntas cantadas que pudieran surgir del selecto auditorio de Basilea. Son las siguientes:
u “¿Por qué no se abre el corralito?” Y la respuesta que deberá pronunciar Pignanelli (con traductor simultáneo) será: “No bien haya acuerdo con el Fondo no habría impedimento para levantar por etapas las restricciones”.
u “¿Por qué no hay solución a los amparos?” Respuesta: “Es una cuestión que debe resolver la Corte Suprema, cuyas decisiones son respetadas por el Gobierno. Igualmente, la salida por amparos está disminuyendo. Y disminuirá aún más con el nuevo plan canje de bonos”.
u “¿Por qué aplicaron nuevas medidas de control cambiario?”, podría ser otra pregunta molesta, anticipada por los escribas de Pignanelli. Y la respuesta entonces debería ser: “En la medida de que no se tenga un buen colchón de dólares de divisas, la economía queda muy vulnerable a no tener cerrado un acuerdo con el FMI. Apenas se llegue a un acuerdo, se va a revisar de inmediato las medidas restrictivas en el mercado cambiario”.
La “alianza” Lavagna-Pignanelli se consumaría con el viaje de éste a Washington, donde se encontraría con el secretario de Finanzas, que hoy participará de otro foro económico en Londres. Entre el miércoles y el jueves, Pignanelli y Nielsen se reunirán con funcionarios del Tesoro y del Fondo para hacer un último intento por conseguir el milagro.