Eduardo Setti Economista PJ

“No estamos afectados”

“Argentina está casi blindada y, si bien puede haber algunos inconvenientes, la presión sobre la moneda podrá ser controlada por el Banco Central. Si el gobierno de Washington dejaba quebrar a AIG hubiera habido grandes consecuencias en todo el mundo, pero me pregunto ¿por qué en algunos casos se salvan entidades y en otros no? Cuando las cosas se ponen muy feas se empiezan a olvidar de sus doctrinas neoconservadoras. En el plano local no es el fin del mundo porque con una actitud clara de la autoridad monetaria, ante la salida de remesas de dinero, no habrá mayores problemas. Se pueden llegar a ver algunos inconvenientes con las cartas de crédito. En todo el mundo se está tratando de encontrar las excepciones al desparramo y resulta ser que la Argentina se encuentra entre los que no están afectados. Tenemos un sistema que no depende del financiamiento externo ni movimientos de corto plazo, como es el caso de Brasil.”

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Aldo Ferrer Grupo Fénix

“La incidencia es baja”

“La crisis financiera internacional tiene una incidencia baja en la economía real argentina, dado que el país no apeló al financiamiento externo. El país responde con sus propios recursos manteniendo el rumbo de su política económica. A partir de ahora Argentina debe prestar atención a la inflación, el tipo de cambio, el financiamiento y la calidad de gestión de la política económica. La inflación no está descontrolada y sería ideal que el aumento del costo de vida se ubique entre el 8 y 10 por ciento anual. El tipo de cambio tiene que ser competitivo y estable, y es necesario fortalecer la banca pública y los bancos de inversión. Además, hay que reforzar la calidad institucional, dándole participación al Congreso Nacional y se podría crear un consejo económico social, que fomente la sinergia entre lo público y lo privado.”

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Ignacio de Mendiguren Vice de la UIA

“Estamos protegidos”

“En la década de los ’90 recibimos los coletazos de todas las crisis, pero hoy el Gobierno tiene otra actitud. La medida que aceleró los procesos antidumping es un claro ejemplo. Cuando suceden estas crisis se alteran los mercados de bienes por la falta de financiamiento, y entonces los países afectados quieren descargar estas crisis en otros mercados. Argentina se está protegiendo y no repetiremos la experiencia de los noventa, que fue la peor porque desde el gobierno hicieron lo peor que se podía hacer: nada. Queremos que se aplique una serie de medidas que apuntan a mejorar y resguardar la competitividad de la industria, en sintonía con las acciones del Gobierno. Analizamos la posibilidad de subir los derechos de importación y buscamos que las contribuciones patronales se cancelen a cuenta del IVA. Esta medida, además de mejorar la competitividad de los sectores transables, es un fuerte incentivo al blanqueo laboral.”