El presidente de Repsol-YPF, Antonio Brufau, dejó entrever que no permitirá que una empresa extranjera compre más del 30 por ciento de la petrolera hispano-argentina. “Los centros de decisión del grupo (Argentina y España) son enormemente importantes y se protegen mejor si no hay un accionista que sea propietario del ciento por ciento de la compañía”, aseguró el ejecutivo. Brufau advirtió a los interesados en la adquisición de participaciones dentro de Repsol-YPF –básicamente la rusa Lukoil– que “se les exigirá que sean colaboradores”. La compañía quiere evitar que se hagan con el 30 por ciento de su capital, lo que los obligaría a lanzar una OPA por el ciento por ciento de sus acciones. Lukoil, una petrolera rusa de capital privado y la segunda en reservas de gas y crudo del mundo, pretende comprar una participación del 20 por ciento de Repsol, que fue puesta a la venta por Sacyr Vallehermoso, así como el 9 por ciento adicional en manos de otros accionistas, como La Caixa. Brufau le solicitó al gobierno de José Luis Zapatero que Repsol-YPF continúe siendo una empresa “privada e independiente”.