La líder de la Coalición Cívica, Elisa Carrió, disparó ayer nuevas críticas contra el matrimonio de Néstor y Cristina Kirchner, desde la asamblea agropecuaria en la Sociedad Rural de Mar Chiquita, al decir que la Presidenta y su predecesor “quieren quebrar la actividad productiva que no les consienten sus negociados”. Sobre la opinión de los dirigentes Mario Llambías y Alfredo De Angeli, que consideraron que la falta de políticas para el sector se deben a una “revancha” del Gobierno, Carrió sostuvo que es más que eso. “Es una estrategia de venganza, para que los productores se vayan. Quieren pisar el precio, para poder comprar la tierra y quedarse con la rentabilidad del campo”, denunció. “Una vez que a la tierra la compren sus amigos, ahí si van a querer bajar las retenciones”, sostuvo y reiteró su polémica frase: “Son una banda de ladrones”, aseguró pese a que todavía no pudo presentar ninguna prueba capaz de comprometer a un funcionario oficial con las múltiples maniobras delictivas y conspiraciones que denuncia cotidianamente.