La automotriz BMW llegó a un acuerdo con el Gobierno para equilibrar su balanza comercial. Compensará sus importaciones, a partir de arreglos a los que llegó con empresas de otros sectores, con la exportación de autopartes, cuero para tapizados y arroz procesado. El convenio con el Gobierno fue firmado por la ministra de Industria, Débora Giorgi; el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, y el presidente de BMW Group Argentina, Alejandro Echegaray, quien señaló que “nos deja muy satisfechos porque el mercado argentino valora nuestra marca y nos permite seguir trabajando para el futuro”. Fuentes de Industria señalan que el déficit de 3300 millones de dólares que se verificó en 2010 en el intercambio de autos por parte de las terminales radicadas y las netamente importadoras pasará en 2012 a un superávit de 800 millones. Ese valor se compone sólo por el intercambio de vehículos terminados, lo que sugiere que fueron las empresas radicadas las que impulsaron una modificación importante en su política comercial. La única firma que todavía no logró un acuerdo con el Gobierno es Suzuki, que recién esta semana inició el trámite con el pedido de la licencia de configuración de modelo, necesaria para importar autos.