ECONOMíA • SUBNOTA › ESTRATEGIAS CRUZADAS EN LA OPOSICIóN
› Por Miguel Jorquera
A pesar de los duros cuestionamientos opositores al proyecto de Presupuesto que envió el Gobierno al Congreso, el kirchnerismo comenzó a abrirse paso para la aprobación en Diputados del cálculo de ingresos y gastos para 2012. El macrismo y un sector del peronismo disidente firmaron en disidencia parcial el dictamen de la mayoría oficialista y lo acompañarán en general en el recinto de la Cámara baja. El interbloque del FAP presentó una serie de cuestionamientos, pero se podría abstener en la votación en general y daría pelea en la discusión de esos puntos en particular. El radicalismo tiene su propio dictamen de minoría, pero dará quórum para su tratamiento y definirá la próxima semana la postura que llevará al recinto, aunque se mostró “a favor de que el país tenga presupuesto”. El grueso del desmembrado Peronismo Federal también definirá el martes próximo la postura que llevará al recinto, pero admiten que “ya hay una voluntad mayoritaria dentro de la Cámara para aprobarlo”. La Coalición Cívica votará en contra.
Sin ahorrar críticas pero dispuestos a no repetir la experiencia de 2010 –cuando el Grupo A no dio quórum, dejó sin Presupuesto al Gobierno y lo obligó a reconducir el del año anterior–, la oposición asumió ahora una actitud más laxa con la propuesta oficialista. Los dos representantes del PRO en la Comisión de Presupuesto de la Cámara baja, Julián Obiglio y Jorge Triaca, firmaron en disidencia parcial el dictamen del oficialismo y sus aliados más cercanos. “Vamos a dar quórum, votaremos a favor en general y pediremos modificaciones en particular”, dijo Obiglio a Página/12 para definir cuál será la postura del macrismo en el recinto.
Lo mismo hizo Marcelo López Arias, del bloque peronista disidente que conduce Graciela Camaño, que la semana entrante discutirá su postura en el recinto, pero que a priori no descarta el apoyo en general al proyecto oficial. El disminuido Peronismo Federal también lo discutirá el martes próximo, aunque sus posturas están más divididas. “No vamos a impedir que se vote. No hay dudas de que ya hay una voluntad mayoritaria en la Cámara para que se apruebe”, admitió ante este diario el denarvaísta Gustavo Ferrari, uno de los más críticos dentro del PJ disidente con la propuesta oficial.
“La postura en el recinto la definiremos la semana próxima”, afirmó el radical Miguel Giubergia, vicepresidente de la Comisión de Presupuesto. Desde el principal bloque opositor, insistieron en que la UCR “no trabará el tratamiento del Presupuesto”, aunque aún no resolvieron si su actitud será de rechazo total o la estrategia pasará por la discusión en particular del proyecto oficial.
En tanto, la socialista Alicia Ciciliani adelantó que el interbloque del Frente Amplio Progresista se abstendría en la votación en general para discutir en particular las modificaciones que propuso en la comisión. “La abstención en la votación en general podría ser una opción, por eso no presentamos esta vez un proyecto propio. Lo empezamos a discutir en el interbloque pero todavía no lo definimos”, completó ante Página/12 Horacio Alcuaz, diputado del GEN y coordinador del interbloque del FAP. En cambio, en la presentación de su proyecto “alternativo”, los cívicos Alfonso Prat Gay y Fernanda Reyes confirmaron que votarán en contra del Presupuesto.
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