La ley que envió el gobierno bonaerense al Congreso provincial le permitirá recaudar 2485 millones de pesos. Además de los cambios del impuesto inmobiliario rural, que representan tan sólo 450 millones, el proyecto incluye reformas en Ingresos Brutos, Sellos e Impuesto Automotor. Los cambios en Ingresos Brutos incrementan las alícuotas en el sector Servicios y Comercio para los contribuyentes más grandes, que pasarán a pagar el 3,5 por ciento de sus ventas en lugar del 3 por ciento vigente. Actividades que gozaban de tasas diferenciales como la bancaria, financiera y de telefonía también pagarán más impuestos. A su vez, se elimina la exención que gozan los operadores de televisión por cable y satelital. Lo mismo sucederá con las cooperativas que deberán comenzar a pagar el tributo. En el caso del Impuesto de Sellos, la reforma propone un incremento general de la alícuota. La segunda parte de las modificaciones amplía la capacidad de endeudamiento del gobierno de la provincia de Buenos Aires en dos mil millones de pesos y crea facilidades para que los municipios financien sus operaciones con proveedores. El 38 por ciento de los recursos será destinado automáticamente a los municipios.