En Jujuy, trabajadores agrupados en la intersindical estatal y de ATE fueron desalojados por la fuerza, con gases y balas de goma, por la policía provincial, en las oficinas de la Dirección de Rentas y zonas aledañas, donde se encontraban realizando una protesta por demanda de un aumento salarial. “No es con represión como nos van a parar”, dijo Fernando Acosta, dirigente de ATE, quien al igual que medio centenar de manifestantes fue detenido y luego puesto en libertad por orden del fiscal de investigación, Gustavo Araya. Hoy habrá una nueva protesta y un paro de los trabajadores estatales.